El juez suspende una sanción por la "crisis que afecta a las clases medias"

  • Un juez ha acordado dejar en suspenso una reclamación del Ayuntamiento de Sevilla por recogida de basuras debido a la "crisis económica que afecta gravemente a las clases medias", en este caso a un abogado que alega que no debe pagar la recogida de residuos en su despacho profesional.

Sevilla, 25 jul.- Un juez ha acordado dejar en suspenso una reclamación del Ayuntamiento de Sevilla por recogida de basuras debido a la "crisis económica que afecta gravemente a las clases medias", en este caso a un abogado que alega que no debe pagar la recogida de residuos en su despacho profesional.

El Ayuntamiento de Sevilla reclamó al abogado demandante, José Manuel Sánchez del Águila, 403 euros correspondientes a la tasa de recogida de basuras en la calle Monte Carmelo de Sevilla, a lo que el afectado se negaba por tratarse de un despacho profesional que no genera residuos.

El juez de lo Contencioso-Administrativo 10 de Sevilla, en un auto al que ha tenido acceso Efe, reconoce que los principios de "legalidad y ejecutividad" obligan a no suspender el acuerdo municipal de cobro, pues 403 euros no tendrían repercusión "en circunstancias económicas normales".

Sin embargo, "nos encontramos ante una grave crisis económica que afecta gravemente a las clases medias", lo que le lleva a acordar la suspensión del cobro.

A ello une que el juicio por esta causa ha sido fijado para dentro de dos años, el 28 de abril del 2015, debido a la "indeseable dilación" que sufren todas las causas judiciales por la excesiva carga de asuntos que tiene el juzgado, con "muchos más asuntos" que los fijados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Estos retrasos, no imputables a los jueces, secretarios ni funcionarios judiciales, "tampoco deben cargarse sobre los intereses de los justiciables", dice el juez Alfredo de Diego, por lo que "la única forma de paliar los perjuicios de la dilación es suspender la ejecución de la resolución", sin exigir garantías adicionales.

El juez aprovecha el auto para recordar que su juzgado tiene una carga de trabajo situada muy por encima de la que "razonablemente puede resolverse con garantías de atención y dedicación".

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