El personal de la ONU rinde tributo a los 26 compañeros asesinados en 2012

Naciones Unidas, 15 dic.- El personal de la ONU rindió hoy tributo a los 26 compañeros que fueron asesinados el año pasado en el ejercicio de sus funciones en todo el mundo, lo que supone un 25 % menos que los que 35 que fallecieron en 2011.

"Seguiremos yendo a cualquier sitio para hacer nuestro trabajo, pero todos tienen que tener en cuenta nuestra seguridad", afirmó hoy la presidenta del sindicato de trabajadores de la ONU, Barbara Tavora-Jainchill.

La representante de los empleados de Naciones Unidas pidió nuevamente al secretario general, Ban Ki-moon, que ofrezca a todo el personal del organismo internacional unas condiciones de trabajo "más seguras".

Según el sindicato, el año pasado fueron asesinados 26 empleados de la ONU, incluidos nueve civiles y 17 "cascos azules", de los que dos eran policías, así como un consultor y cuatro tripulantes de un helicóptero.

Los dos incidentes más sangrientos tuvieron lugar el pasado 8 de junio, cuando siete "cascos azules" fueron asesinados en Costa de Marfil, y el pasado 2 de octubre, cuando otros cuatro "cascos azules" murieron en un ataque en Darfur.

Además, el sindicato de empleados de Naciones Unidas detalló que al menos cinco civiles del organismo murieron el año pasado durante el conflicto en Siria y nueve "cascos azules" fueron asesinados en Darfur en los últimos doce meses.

Muchos trabajadores de la ONU resultaron heridos en 2012 y varios empleados fueron secuestrados, algunos de ellos por largos periodos de tiempo, como dos "cascos azules" jordanos retenidos durante 136 días y un empleado del Programa Mundial de Alimentos otros 86 días.

"Es triste ver cuantos compañeros murieron o fueron secuestrados el año pasado mientras trabajaban para facilitar ayuda humanitaria o traer paz a las poblaciones locales", indicó Tavora-Jainchill, quien lamentó que cada vez más son objetivo de ataques violentos.

Por último, la presidenta del sindicato hizo un llamamiento a los Gobiernos para que hagan "todo lo que esté a su alcance" para que se proteja a los empleados de Naciones Unidas que se ponen en riesgo para mejorar las condiciones de vida de la población.

La mayoría de los incidentes del año pasado se registraron en países africanos: Egipto, República Democrática de Congo, Somalia, Sudán y Sudán del Sur, así como en la Franja de Gaza, en Pakistán y en Siria.

Según datos recogidos por el sindicato, en 2011 fueron asesinados 35 empleados de la ONU en el ejercicio de sus funciones en todo el mundo, lo que supuso más del doble de los 15 que fallecieron en 2010.