Madrid, 23 feb.- El Poder Judicial ha elegido hoy a Fernando Grande-Marlaska, el juez que procesó al exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi, para presidir la sala de lo penal de la Audiencia Nacional, órgano que marca las pautas en la batalla judicial contra el crimen organizado, la corrupción o el terrorismo.
Grande-Marlaska, que relevará a Javier Gómez Bermúdez en el cargo que éste ha ocupado durante casi ocho años, ha acogido su nueva responsabilidad contento, "con mucha ilusión y con ganas de ilusionar" a sus compañeros, así como de "formar un verdadero equipo" y "ser uno más" en él.
Deja así el Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, que ocupaba desde enero de 2007 y desde el que ha investigado numerosas causas contra ETA y su entorno, como la que le llevó a enviar a prisión a 31 supuestos miembros de la organización ilegalizada Segi, señalada por el juez como una "auténtica academia terrorista".
Una de sus últimas decisiones en ese juzgado ha sido el archivo de la investigación de las posibles irregularidades en la contratación del Yak-42 que se estrelló en 2003 en Turquía, causando la muerte a 62 militares.
Pero esa no ha sido la única causa mediática con la que ha tenido que lidiar desde que llegó a la Audiencia Nacional en 2004: en el Juzgado Central número 5, cuando sustituyó a Baltasar Garzón durante su estancia en Nueva York en 2005 y 2006, procesó al portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi por integración en ETA y prorrogó la suspensión de actividades de la coalición ilegalizada.
En ese mismo periodo dirigió la operación contra el aparato de extorsión de ETA conocida como "caso Faisán", que tuvo que ser aplazada unas semanas tras el "chivatazo" que alertó a la banda terrorista de la misma, cuya autoría aún no ha sido esclarecida.
A partir de hoy, según él mismo ha declarado, apostará por "clarificar" las competencias de la Audiencia Nacional en materia de delincuencia organizada, ya que esta sede es el "buque insignia" a nivel nacional e internacional contra el crimen organizado.
Un reto al que este magistrado bilbaíno, de 50 años, llega tras una reñida elección en el pleno del órgano de gobierno de los jueces, que ha tenido que realizar dos votaciones para que finalmente Grande-Marlaska se impusiera por once votos a nueve a Gómez Bermúdez, que optaba a la reelección, mientras que otro vocal del Consejo General del Poder Judicial ha votado en blanco.
El candidato derrotado ha señalado que su relevo no responde ni a "conspiraciones" ni a "venganzas" y ha considerado que Marlaska "puede dar un impulso diferente" a este órgano con un estilo muy diferente al suyo, lo que, a su juicio, hará que "la sala y la Audiencia progresen, porque es lo que le hace falta a España".
Grande-Marlaska también competía en el puesto con los magistrados Teresa Palacios, Javier Martínez Lázaro y Alfonso Guevara y el de la Audiencia Provincial de Madrid Juan Pablo González.
Poco han tardado en llegar las felicitaciones a Grande-Marlaska, uno de los primeros jueces que reconoció públicamente su homosexualidad, por su nombramiento.
Nada más conocer la noticia los trabajadores del juzgado de instrucción del que hasta ahora era titular le han preparado una fiesta sorpresa, con brindis con cava incluido y presidido por el que ha sido su primer regalo, un centro de orquídeas que le ha sido entregado poco después de conocer la decisión del pleno del CGPJ.EFE
ada.slp.tri/sc
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