El PSE dice que el PNV no movilizó ni a sus militantes y seguirá cosechando fracasos

Vitoria.- El secretario general del PSE-EE de Álava, Txarli Prieto, ha opinado hoy que el PNV fracasó ayer de manera "estrepitosa" al festejar el Aberri Eguna porque no movilizó ni a sus militantes y ha advertido al PNV de que si piensa solamente en tumbar al Gobierno Vasco "seguirán cosechando fracasos".

En una comparecencia de prensa en Vitoria, en la sede del PSE-EE de Álava, Prieto se ha referido al acto organizado por el PNV en Bilbao, el cual, a su juicio, no movilizó siquiera a sus militantes y eso que se sirvieron "canapés".

"Justo albergó a unos cuantos puñados de militantes del partido que cabían cómodamente sentados y con muchos espacios libres", por tanto, ha opinado que "más que una celebración fue una defunción" por "el fracaso estrepitoso" de participación ciudadana.

Asimismo, ha hecho hincapié en que las fuerzas nacionalistas celebraran este día de forma "fragmentada y dividida" en cuatro actos diferentes y ha recordado que la otra mitad de la sociedad vasca no tiene cabida en actos de este tipo.

Por ello, ha considerado que se trata de una fiesta "que no tiene ningún futuro ni ningún sentido" y que está "obsoleta".

En cuanto al discurso del presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha lamentado que buscara "la confrontación de los nacionalistas con el actual Gobierno Vasco" y ha advertido de que si el PNV piensa solamente en "cómo tumbar" al Ejecutivo socialista, "seguirán cosechando fracasos".

Por otro lado, ha criticado que el PNV volviera ayer "a las catacumbas" y que esté sólo "empeñado en lanzar una OPA hostil al resto de partidos nacionalistas para intentar absorberlos" y que siga pensando "en liderar un polo soberanista".

En este sentido, ha opinado que es "muy chocante" que "un patriota vasco" -por Urkullu- utilice ese día "para llamar a la confrontación entre ciudadanos" y para fijar el objetivo de la política en "tumbar un gobierno democrático, nacido y surgido de las urnas y de una mayoría parlamentaria".

A su juicio, Urkullu está "muy lejos de querer comportarse como un patriota que quiere a su país" porque está planteando un camino "de división" de la sociedad vasca, en lugar de un camino de resolución de los problemas económicos y sociales.

Finalmente, ha abogado por reemplazar la celebración del Aberri Eguna por la conmemoración del "Día de Euskadi", el 25 de octubre, y ha dicho que, en torno a esta fiesta sí que estará el lehendakari porque tiene un carácter "institucional y unitario", representa "el futuro y la modernidad", y ha sido convocado por el Parlamento Vasco y no por un partido.