El psoe pide a los sindicatos una “alianza estrecha” frente a la reforma laboral

El portavoz del PSOE en la Comisión de Economía del Congreso, Valeriano Gómez, considera que UGT y CCOO deben afrontar la reforma laboral de 2012 poniendo en marcha “una alianza estrecha con las fuerzas políticas de izquierda”.
Gómez hace esta reflexión en análisis sobre la reforma laboral que publica el número de mayo de la revista ‘Temas’, que preside Alfonso Guerra. En este artículo también opinan el secretario general de UGT, Cándido Méndez, y el de CCOO, Ignacio Fernández Toxo.
A este respecto, el portavoz de Economía del PSOE señala que “los efectos de las reformas del PP están suponiendo una enorme conmoción en nuestro mercado de trabajo. No hay ningún indicador relevante que no presente registros históricos en términos negativos”.
Respecto a qué deben hacer los sindicatos frente a la reforma laboral impulsada por el Gobierno del PP, Gómez sostiene que, en este contexto, las “alianzas” sindicales “deben ser las que se corresponden con el papel de organizaciones esenciales en nuestro modelo de convivencia y en la defensa de los trabajadores: más papel en las empresas, más capacidad de diálogo y comunicación con las demás fuerzas sociales y una alianza estrecha con las fuerzas políticas de izquierda”.
"CRUZADA"
Por su parte, Méndez, en este mismo artículo de la revista ‘Temas’, afirma que los cambios en la normativa laboral introducidos por el Ejecutivo han supuesto “una profunda regresión en el derecho laboral y en las instituciones colectivas de promoción y defensa del trabajo en un contexto de grave y prolongada crisis económica”.
Entre los efectos “más negativos e inmediatos”, el responsable de UGT cita “el incremento de los despidos, las rebajas unilaterales de salarios y condiciones de trabajo y el empeoramiento generalizado de la calidad de la contratación laboral. Además, la pérdida para un número creciente de trabajadoras y trabajadores de la posibilidad de vivir dignamente de su trabajo, y una mayor inseguridad e incertidumbre sobre su futuro”.
A su vez, Toxo apunta que con la reforma el PP buscaba “asestar un golpe mortal a los sindicatos de clase, dentro y fuera de los centros de trabajo, no es ningún secreto, ya que muchos de sus instigadores lo habían venido defendiendo sin tapujos desde hacía mucho tiempo. Las medidas antisindicales de gobiernos autonómicos del PP hacían presagiar esa cruzada contra el sindicalismo”.