Zamora, 14 mar.- Jaime Giménez Arbe, conocido como El Solitario, ha criticado hoy los juicios paralelos en la prensa y sus condiciones de prisión, aislado del resto de presos, en su alegato final en el juicio que se ha seguido contra él en la Audiencia Provincial de Zamora como presunto autor de un atraco en Toro.
El Solitario ha asegurado que no tiene "nada que ver" con el robo cometido el 18 de mayo de 2007 en una sucursal de Caja Rural de Toro, de la que presuntamente se llevó cerca de 7.000 euros y disparó al cajero en una pierna porque el dinero le parecía insuficiente.
Giménez Arbe ha reiterado que es inocente, que nunca ha estado en Toro y que tampoco cometió el asesinato de dos guardias civiles en Navarra por el que ya ha sido condenado a 47 años de prisión en sentencia ratificada por el Tribunal Supremo.
El Solitario ha acusado hoy a los gobiernos de Portugal y España de ser responsables de sus condiciones de prisión de los últimos cinco años, que le están "dañando el cerebro" por su aislamiento, que ha calificado de "régimen de tortura".
En la segunda jornada del juicio celebrada hoy en Zamora, las partes han ratificado las penas solicitadas y el fiscal ha pedido 12,5 años para el acusado, cinco por un presunto delito de robo con intimidación con la agravante de disfraz, otros cinco por lesiones y dos años y medio por tenencia ilícita de armas.
La acusación particular ha elevado a seis años la pena por las supuestas lesiones, por las que solicita además una indemnización de unos 40.000 euros, mientras que la defensa ha pedido la libre absolución.
El fiscal jefe de Zamora, Rafael de Vega, ha asegurado que las declaraciones de los testigos y la grabación de vídeo de la sucursal bancaria no dejan lugar a dudas de la autoría del atraco, a lo que hay que sumar el hecho de que un pastor identificó posteriormente al acusado en las inmediaciones de Toro cuando conducía una furgoneta Renault Kangoo como la que era propiedad de Jaime Giménez Arbe.
Además ha aludido a los restos del proyectil que disparó en el atraco y los informes ratificados por los peritos en el juicio, que han acreditado que correspondía a un revólver intervenido al acusado.
Sin embargo, el abogado defensor, Marcos García Montes, ha aludido a un informe del FBI para rechazar que el arma intervenida coincidiera con la que se efectuó el disparo al cajero y a las contradicciones sobre si el proyectil disparado tenía cinco o seis estrías.
García Montes también ha mencionado las "contradicciones" de los testigos y ha argumentado que el sumario contiene errores, hay "graves contradicciones" en algunos informes policiales y los registros practicados en la vivienda madrileña de El Solitario y en una nave en la que se encontraron algunas de las pruebas carecían, a su juicio, de las garantías legales. EFE
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