El SUP recuerda a los policías que no hay atajos para cumplir la ley

  • El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha pedido hoy al Gobierno que diga a todos los policías que "no hay atajos en el cumplimiento de la ley" y que cualquier agente que reciba una orden ilegal de un responsable político debe denunciarlo inmediatamente.

Madrid, 20 sep.- El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha pedido hoy al Gobierno que diga a todos los policías que "no hay atajos en el cumplimiento de la ley" y que cualquier agente que reciba una orden ilegal de un responsable político debe denunciarlo inmediatamente.

Así lo expresa en una nota ante la reunión que el pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional celebra a partir de hoy para decidir el destino del llamado "caso Faisán", en el que se investiga la autoría del soplo que en 2006 alertó a ETA de una operación policial contra su aparato de extorsión.

El SUP también solicita al Ejecutivo que garantice protección legal para los policías que, "habiendo cumplido órdenes ilegales en el pasado con gobiernos del PSOE o del PP", decidan denunciarlo.

Subraya que los culpables del "chivatazo" a ETA deben ser identificados, detenidos y enjuiciados por considerar que "son malos profesionales y no saben ser policías en democracia".

Para el sindicato, el sumario del "caso Faisán" presenta "un cúmulo de irregularidades", de las que, en opinión del SUP, son responsables los tres jueces que han instruido el caso (Baltasar Garzón, Fernando Grande-Marlaska y Pablo Ruz) y los miembros del equipo de investigación policial encargado del esclarecimiento de los hechos.

"Si la investigación del GAL hubiese sido encomendada a José Amedo y Michel Domínguez posiblemente el resultado de los juicios posteriores hubiese sido distinto y, o bien no se hubiese identificado a los responsables de dichos actos corruptos y mafiosos, o se habría señalado a personas inocentes", señala el SUP.

En el "caso Faisán", el sindicato indica que los policías encargados de la investigación son miembros de la lucha antiterrorista, que estaban desplegados sobre el terreno y que como miembros de la Unidad Central de Inteligencia (UCI) de la Comisaría General de Información podían encontrarse con conflictos profesionales de intereses que hubieran aconsejado que la investigación hubiese sido dirigida por otra unidad.

Mostrar comentarios