El TS rechaza aumentar la indemnización a un hijo del general Justo Oreja

  • El Tribunal Supremo ha rechazado aumentar la indemnización de 20.000 euros que la Audiencia Nacional fijó para los hijos del general Justo Oreja, asesinado por ETA en 2001, en la sentencia en la que condenó a 319 años de prisión al etarra Juan Luis Rubenach.

Madrid, 20 abr.- El Tribunal Supremo ha rechazado aumentar la indemnización de 20.000 euros que la Audiencia Nacional fijó para los hijos del general Justo Oreja, asesinado por ETA en 2001, en la sentencia en la que condenó a 319 años de prisión al etarra Juan Luis Rubenach.

En una sentencia notificada hoy, el alto tribunal inadmite el recurso presentado por uno de los cuatro hijos de Oreja, al considerar que no estaba legitimado porque había hecho "cesión de sus acciones" al Estado, que le adelantó la indemnización en virtud de la Ley de Víctimas del Terrorismo y que, de hecho, será quien reciba las cantidades que en su caso abonen los etarras.

Además, el Supremo dice que las indemnizaciones fijadas en la sentencia que condena a Rubenach son iguales a las que estableció en una sentencia anterior, en la que condenó por los mismos hechos a los etarras Ana Belén Egüés y Aitor García Aliaga, por lo que la resolución "resulta conforme a un principio de mínima congruencia".

El hijo de Justo Oreja alegó también que en otros casos de atentado terrorista se habían establecido indemnizaciones mayores, pero el tribunal le responde que "la apreciación de una vulneración del derecho a la igualdad exige la acreditación de supuestos absolutamente idénticos que hayan sido tratados de manera arbitraria, lo que en el presente caso no acontece".

En diciembre de 2010, la Audiencia Nacional condenó a Rubenach por el atentado con bicicleta-bomba que costó la vida al general Justo Oreja Pedraza el 28 de junio de 2001 en Madrid, mientras que el segundo acusado, Gorka Palacios Alday, fue absuelto por falta de pruebas.

El tribunal consideró que la participación de Rubenach en estos hechos ha quedado "plenamente probada" (se encontraron huellas suyas en un vehículo utilizado en el atentado), pero no así la de Palacios, porque no existía "un dato fáctico que corrobore" su intervención.

En el juicio, la Fiscalía presentó como prueba las declaraciones policiales de los integrantes del comando "Buru Ahuste" Ana Belén Egües y Aitor García Aliaga, condenados anteriormente a 323 años por estos hechos.

Además de a la pena de prisión, Rubenach fue condenado al pago de una indemnización de 70.000 euros a la viuda del general y de 20.000 euros a cada uno de sus cuatro hijos.

Estas cantidades eran sensiblemente inferiores a las solicitadas por la Fiscalía y por la Asociación de Víctimas del Terrorismo Verde Esperanza -900.000 euros- y por la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), que pidió una indemnización de un millón de euros para la familia.

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