Elección nueva defensora del Pueblo genera opiniones encontradas en Panamá

Panamá, 4 sep.- La elección de la nueva defensora del Pueblo de Panamá, Lilia Herrera Mow, generó hoy reacciones diversas entre diputados oficialistas y de oposición, y también entre algunos aspirantes al cargo, en torno a si su elección fue o no impuesta por el Gobierno del presidente Ricardo Martinelli.

Herrera, que deberá tomar posesión del cargo tras ser elegida e inmediatamente juramentada hoy por la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), dijo a periodistas que trabajará para que "realmente la institución recobre la credibilidad".

La nueva defensora hasta hace poco se desempeñaba como jefa de Recursos Humanos en la estatal Autoridad Marítima de Panamá (AMP) y era miembro del gobernante partido Cambio Democrático (CD), por lo que las críticas realzan este punto y el de una supuesta influencia del Ejecutivo.

El diputado del opositor Partido Panameñista (PPa) Alcibiades Vásquez dijo a Efe que la elección de Herrera en reemplazo de Patria Portugal, destituida el 5 de agosto pasado por "negligencia notoria" en el cumplimiento de sus funciones, "es la crónica de una imposición señalada".

Herrera fue elegida entre 49 aspirantes con 38 votos a favor, 7 abstenciones y uno nulo, en una sesión del pleno legislativo, integrado por 71 diputados, y ejercerá el cargo hasta 2016, el año en que finalizaba el período iniciado por Portugal en 2011.

"Sabíamos de antemano que el Gobierno no iba a permitir que alguien que no fuera de sus filas ocupara esa posición", afirmó Vásquez, lamentando que desde que fuera creada la Defensoría, en 1997, hayan ocupado ese cargo siete personas.

Sin embargo, el diputado panameñista indicó que Herrera tiene la "gran oportunidad" de demostrar que "verdaderamente" quiere hacer un trabajo independiente por los derechos humanos de los ciudadanos.

"Pero para hacerlo primero tiene que demostrarlo con sus acciones y no ser sumisa a las decisiones y presiones gubernamentales", expresó Vásquez.

El diputado José Muñoz, del partido CD, dijo a Efe que, de antemano, él y sus colegas oficialistas sabían que cualquiera que hubiera sido la elección "esas críticas iban a venir de parte de la oposición".

Muñoz defendió la designación de Herrera, señalando que no se puede descalificar a un persona por el hecho de haber estado inscrita en un partido y que por esta razón no pueda hacer un buen trabajo.

Es más, agregó Muñoz, todos los defensores que les correspondió ejercer el cargo desde la creación de la institución eran personas provenientes de partidos políticos "y eso no los descalifica".

"A nosotros nos corresponde como diputados solamente ver su currículo, y de todas las 49 personas (candidatos) que vimos consideramos que la señora Lilia Herrera era la que más llenaba y tenía ese perfil para ser defensora del Pueblo", indicó el diputado oficialista.

El exfuncionario de la Defensoría Roberto Bruneau Walteros, uno de los 49 aspirantes al cargo en sacar más votos después de Herrera, con 10, dijo a periodistas que la elección, como en anteriores ocasiones, fue una "burla" pero "más descarada".

Por su parte, el exprocurador y abogado de Portugal, Rogelio Cruz, señaló que el Parlamento cometió una "gran irresponsabilidad" al elegir a un nuevo defensor cuando aún no se han resuelto recursos judiciales presentados contra la destitución de su defendida ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ).

"Imagínese que la Corte diga que la destitución (de Portugal) violó sus derechos fundamentales, como espero, entonces ella tendría que regresar al cargo y el nuevo titular tendría que salir", afirmó Cruz.

El Ministerio Público investiga a Portugal por la adjudicación supuestamente irregular de contratos de forma directa a empresas vinculadas a una misma familia, por un total de 450.000 dólares, en un periodo de cinco meses.