Moscú, 3 oct.- La embajada británica en Moscú negó hoy que el Gobierno del Reino Unido haya elaborado una lista negra de funcionarios rusos implicados en la muerte en prisión del abogado ruso Serguéi Magnitski, a los que supuestamente no permitiría entrar en el país.
"No hay ningún cambio en la política gubernamental. Seguimos sintiendo inquietud en relación con el caso Magnitski", declaró un portavoz de la embajada británica en Moscú a la agencia Interfax.
La fuente diplomática salía así al paso de las informaciones del dominical británico "The Observer" de que el Gobierno británico habría prohibido la entrada en el Reino Unido de al menos 60 funcionarios rusos implicados en la muerte del abogado.
"Continuamos tramitando las solicitudes de visado de manera individual en consonancia con los reglamentos migratorios", añadió el portavoz de la embajada.
Los activistas rusos recibieron con satisfacción la noticia publicada por The Observer, al considerar que las autoridades rusas apenas han avanzado en el esclarecimiento de las circunstancias de la muerte y tampoco han dirimido responsabilidades.
"No se hizo nada, por lo que hubo que recurrir a Occidente", dijo Ludmila Alexéyeva, veterana activista rusa, a la agencia oficial RIA-Nóvosti.
En agosto la secretaría de Estado norteamericana presentó una lista negra que incluye a jueces, fiscales, investigadores y funcionarios de prisiones rusos implicados en el fallecimiento de Magnitski, que no podrán viajar a EEUU.
En respuesta, Rusia anunció que prepara su propia lista de ciudadanos estadounidenses en la que podrían figurar funcionarios estadounidenses que han violado los derechos de ciudadanos rusos.
Entre otros, podrían ser incluidos funcionarios que participaron en la detención del supuesto traficante de armas ruso conocido como el "Mercader de la Muerte", Víctor But, que fue recientemente extraditado de Tailandia a EEUU, donde está siendo juzgado.
Recientemente, un segundo médico de la prisión preventiva moscovita de Butirka fue acusado formalmente de causar la muerte de Magnitski, al privarle de asistencia sanitaria.
Magnitski, consultor jurídico del fondo de inversiones Hermitage Capital Management, denunció la existencia de una red de policías corruptos que malversaron fondos estatales por valor de decenas de millones de dólares.
Tras hacer estas revelaciones, fue acusado de estar implicado en la evasión de 5.400 millones de rublos (unos 180 millones de dólares), por lo que se le impuso prisión preventiva, donde falleció en noviembre de 2009 a la edad de 37 años.
Tanto el Parlamento Europeo como los activistas pro derechos humanos consideran que las fuerzas de seguridad rusas le detuvieron al abogado y, posteriormente, le denegaron cuidados médicos para silenciar sus denuncias de corrupción policial.
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