Berlín, 28 sep.- El juicio por homicidio imprudente contra un exsoldado del Ejército alemán, acusado de matar en Afganistán a un compañero mientras jugaba con su pistola, comenzó hoy en la Audiencia Territorial de Gera, este de Alemania.
El acusado, de 21 años, negó al inicio del juicio haber estado jugando con su arma reglamentaria y aseguró que la pistola se disparó sola.
Según el joven, oriundo del estado federado de Turingia, el cargador de la pistola se había quedado atascado después de limpiarla, por lo que le dio un golpe, que provocó que el arma se disparara.
La acusación sostiene que el soldado, que estaba jugando con su pistola P8, apuntó a la cabeza de su compañero, de la misma edad, y apretó el gatillo porque pensaba que el arma no estaba cargada.
Por otra parte, un peritaje de la brigada de investigación criminal de Turingia estableció que el arma del joven, acusado además por la Fiscalía de desobediencia grave, no presentaba defecto alguno.
El incidente, que tuvo lugar en diciembre del año pasado en la provincia afgana de Baghlan, ensombreció la visita sorpresa de la canciller alemana, Angela Merkel, a las tropas de la Bundeswehr desplegadas en Afganistán.
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