España recaudó 250 millones de euros gracias a la lista falciani


El antiguo secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, reveló hoy en la Audiencia Nacional que los datos aportados por el informático italofrancés Hervé Falciani, quien aprovechó su trabajo en el HSBC de Ginebra para copiar los datos de 130.000 presuntos evasores fiscales, ha permitido recaudar en España más de 250 millones de euros.

“Fue la operación de regularización más importante que ha habido en todos mis años y creo que en toda la historia”, dijo Ocaña en su declaración como testigo en la vista de extradición celebrada por la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional.
El ex secretario de Estado de Hacienda explicó que los datos de Falciani que llegaron a la Agencia Tributaria en mayo de 2010 revelaron las cuentas de 659 evasores fiscales españoles y reconoció que “hubiera sido imposible conocer” la bolsa de fraude sin la información copiada por Falciani.
La Fiscalía utilizó precisamente esta colaboración para rechazar la extradición a Suiza de Falciani. “España se ha beneficiado de esa colaboración de una forma histórica”, señaló ante el tribunal la fiscal encargada del caso, Dolores Delgado.
PARAÍSOS FISCAL
La representante del Ministerio Público dijo en este sentido que la actuación de Falciani ayudó a destapar “un fraude global” que representaba entre el 2 y el 2,5 por ciento del PIB de la Unión Europea.
“Cuando alguien colabora para que esto no sea así no se le puede perseguir”, afirmó.
La fiscal Delgado censuró además las prácticas del HSBC, del que dijo que es “un banco que de por sí es un paraísos fiscal” antes de señalar que “la opacidad del sistema financiero beneficia la comisión de delitos”.
El propio informático italofrancés Hervé Falciani aseguró hoy en la vista que la Audiencia Nacional que decidió llevarse y revelar los datos de 130.000 presuntos evasores fiscales con cuentas en el HSBC de Ginebra para denunciar “las escandalosas actuaciones” de la entidad.
PRÁCTICAS DUDOSAS
Falciani explicó que los datos se los entregaron “otros empleados” del HSBC de Ginebra que estaban interesados en que se recogieran “las pruebas de los delitos”. Su intención, según dijo, era denunciar que los “objetivos económicos” del banco entraban en contradicción con sus obligaciones legales.
El informático dijo que, en un principio, quiso denunciar los hechos ante las autoridades suizas pero que estas no accedieron a que aportara los datos de forma anónima, la fórmula a la que recurrió ante el “miedo a represalias”. “La Justicia suiza no estaba interesada en aclarar los hechos”, señaló.
Falciani dejo entrever que no guarda todos los datos de los evasores fiscales en un soporte físico si no que accede a ellos a través de una ‘nube’ encriptada. “Salí de Suiza sin ninguna información, porque estaba ya a disposición de la justicia de forma segura”, dijo ante el tribunal antes de añadir que ha adoptado “un conjunto de medidas de seguridad para evitar que los datos caigan en manos que no sean las de la justicia”.
Falciani aseguró que “nunca” trató de vender los datos y explicó que el único objetivo de su visita a un banco de Beirut (Líbano) en febrero 2008 era desatar las alarmas de las autoridades suizas.
ORIGEN DE LA CRISIS
Eric de Montgolfier, el fiscal francés que se encargó inicialmente de investigar los evasores franceses que aparecían en la información de Falciani, confirmó esta versión de los hechos. “A mi no me pidió nunca nada”, dijo el fiscal francés, que declaró como testigo ante el tribunal.
Montgolfier dijo que Falciani fue fundamental para acceder a “la masa de información”, que “en papel habría llenado un tren de mercancías”, y destacó su “colaboración eficaz”.
“Lo difícil era comprender como un encargado de la seguridad informática de un banco como el HSBC se exponía de ese modo a represalias”, señaló el fiscal.
Montgolfier explicó que el propio Falciani le dijo que pensaba que “la permeabilidad de los bancos al fraude fiscal era una de las causas de la crisis mundial”.
Falciani pidió la palabra al final de la vista para asegurar que “la lucha contra la opacidad financiera” debe ser del “interés de todas las democracias”. El informático reiteró su disposición a “colaborar integralmente” con las autoridades judiciales para la investigación del fraude fiscal y del blanqueo de capitales.
DELIBERACIONES SIN PLAZO
Tras escuchar los argumentos de las partes, el tribunal, presidido por Ángel Hurtado y compuesto por José Ricardo de Prada y Julio de Diego, comenzará ahora las deliberaciones, para las que no tiene plazo. El ponente de la resolución es el magistrado José Ricardo de Prada.
La decisión de la Sección Segunda puede ser recurrida en súplica ante el pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.
Si la Audiencia Nacional decreta finalmente que no se puede extraditar a Falciani, el Gobierno no podrá entregarlo a Suiza. Si el tribunal, en cambio, avala la extradición, el Ejecutivo tendría la última palabra.

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