Fomento mantiene activado el dispositivo antinevadas en carreteras, vías y aeropuertos

El Ministerio de Fomento mantiene activado el dispositivo especial para mantener las infraestructuras del transporte de su competencia en condiciones de uso, ante las nevadas y adversas condiciones meteorológicas que afectan a numerosas provincias españolas.
Según informó Fomento, ha movilizado todos los medios necesarios para prevenir posibles incidencias en las carreteras, ferrocarriles y aeropuertos en Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha, Aragón, Comunidad Valenciana, La Rioja, Murcia y Andalucía.
En las carreteras ha desplegado desde esta noche a los equipos y máquinas extendedoras de fundentes para prevenir en lo posible los problemas de circulación que pudiera conllevar el temporal.
En las comunidades afectadas, el Ministerio cuenta con unas 600 máquinas y un dispositivo de más de 1.000 operarios (conductores de quitanieves, operarios, técnicos, etc).
Por su parte, Renfe ha puesto en marcha un dispositivo especial en sus servicios de larga y media distancia, en concreto dirigido a los trenes que circulan por el norte peninsular, ante la alerta por frío y nieve.
Entre las medidas especiales, que forman parte del protocolo habitual que se sigue en estos casos, la compañía garantiza la disponibilidad de locomotoras de reserva en puntos estratégicos así como personal de refuerzo. Además, Renfe intensificará los medios de atención e información al cliente.
Entre las medidas de atención al cliente, Renfe ha alertado a los proveedores de los servicios a bordo de la necesidad de garantizar el avituallamiento de los viajeros, para que en caso de paradas prolongadas o cortes de energía se disponga de suficientes reservas de comida y bebidas calientes, así como mantas en los trenes nocturnos.
Aena ha puesto en marcha también en los aeropuertos afectados el “Plan de actuación frente a contingencias invernales de hielo y nieve”, más conocido como Plan Invierno. En él se establecen los procedimientos que se siguen en una situación de este tipo con el objetivo de minimizar la influencia de las condiciones invernales adversas en el tráfico aéreo de los aeropuertos.
Durante la temporada de invierno los trabajos se centran en el seguimiento exhaustivo de las condiciones meteorológicas, el chequeo continuo del estado del pavimento en pista, calles de rodaje y plataforma; asegurar la disponibilidad de equipos y material fundente, y realizar mediciones periódicas del coeficiente de rozamiento.