Francia condena a cuatro años a los etarras Martínez Mur y Bengoechea

  • La pareja de etarras formada por José Antonio Martínez Mur y Asunción Bengoechea fue condenada hoy en Francia a cuatro años de prisión cada uno por sus vínculos con el aparato militar de la organización terrorista.

París, 11 oct.- La pareja de etarras formada por José Antonio Martínez Mur y Asunción Bengoechea fue condenada hoy en Francia a cuatro años de prisión cada uno por sus vínculos con el aparato militar de la organización terrorista.

El Tribunal Correccional de París los consideró culpables de los dos cargos por los que habían sido acusados: pertenecer a la banda terrorista ETA y alojar en febrero de 2008 a Mikel San Sebastián y Joseba Iturbide, a los que se buscaba por su participación en el atentado mortal contra el aeropuerto de Madrid Barajas en diciembre de 2006.

La pena conlleva tres de los cuatro años exentos de cumplimiento salvo que vuelvan a reincidir, y el presidente del tribunal, Jean-Michel Ducros, les precisó a los dos que no tendrán que ingresar en la cárcel teniendo en cuenta que ya pasaron varios meses en prisión provisional (ocho él, cuatro ella).

Un juez de aplicación de penas será el encargado de decidir cómo tendrán que ejecutar el tiempo que les resta a cada uno hasta cubrir un año de condena firme.

La sentencia es más dura que los tres años de cárcel -con ocho meses de cumplimiento efectivo-, que había solicitado la fiscal, Fanny Bussac, en el juicio que se celebró el pasado 27 de septiembre.

Martínez Mur y Bengoechea fueron arrestados en la casa que la pareja tiene en la localidad vascofrancesa de San Juan de Luz el 15 de febrero de 2008 junto a San Sebastián e Iturbide, de quienes dijeron durante el proceso que los acababan de conocer y que no sabían que tuvieran vinculación con ETA.

Entre los elementos de la acusación presentados durante el juicio destacó un mensaje incautado al que fuera jefe militar de la banda terrorista, Garikoitz Aspiazu, "Txeroki", al ser capturado en noviembre de 2008.

"Txeroki" se refería a ellos en ese texto en términos familiares -utilizaba los apodos "Txetxu" y "Esti"- y señalaba que su arresto había supuesto un duro golpe para la organización.

Otra prueba clave de la instrucción fue un sobre que tenían en la casa de San Juan de Luz con mil euros y un mensaje de ETA en el que les decían que les enviaban ese dinero.

En ese domicilio se encontraron, además de contactos en la agenda telefónica de diversas personas relacionadas con ETA, trazas genéticas del presunto miembro de la banda José María Saldua Acorta, buscado por la Justicia desde 2006 y fallecido en Aix en Provence, en el sureste de Francia, en 2010.

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