Francia crea una ley para frenar el descontento de los taxistas por el instrusismo en su profesión

    • El usuario podrá ver en tiempo real sobre su smartphone la disponibilidad de taxis en su zona y solicitarlo de modo inmediato.
    • Las matriculaciones deVehículos de Turismo con Chófer (VTC) sólo podrán concederse a conductores con una certificación profesional y a empresas con capacidad financiera.

Cuatro meses después de haber sido nombrado mediador en la crisis entre taxis y Vehículos de Turismo con Chófer (VTC) y de que numerosas asociaciones de taxis llamen a manifestarse este miércoles contra el intrusismo de estos automóviles, el diputado del PS de Saona y Loira (región de Borgoña, Francia), Thomas Thévenoud, presentará esta semana una propuesta de ley para "modernizar y regular" el sistema.

Debatido en la Asamblea Nacional a principios de julio y examinado por el Parlamento, el texto incluye diez de las treinta propuestas del informe presentado a finales de abril.

La reserva de un carril de la autopista A1 que conecta París con el aeropuerto Paris-Charles-de-Gaulle, la creación de un "paquete aeroportuario" o la generalización de la tarjeta de crédito en los taxis han quedado fuera de esta propuesta, según ha asegurado Thévenoud.

El diputado ha propuesto cinco nuevas medidas para "modernizar los taxis" y cinco para "regular los VTC" que se desprenden de un informe calificado "de serio y riguroso" por el secretario general de la Unión Nacional del sector del Transporte y director general de Taxis G7, Serge Metz.

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Concretamente, el usuario podrá ver en tiempo real sobre su smartphone la disponibilidad de taxis en su zona y solicitarlo de modo inmediato. Un dispositivo colocado sobre una plataforma pública dirigida por la autoridad administrativa competente permitirá facilitar este servicio.

Otra de las medidas permite que las licencias para conducir un taxi se obtengan a cambio del pago de 230.000 euros, mientras que antes se conseguían de manera gratuita.

Las listas de espera se revisarán para que éstas solo permanezcan abiertas a conductores certificados, los cuales solo podrán inscribirse una sola vez (actualmente, cada ciudad tiene su lista y algunos taxis se registran varias veces para especular).

Además, estas nuevas licencias ya no se podrán vender y deberán ser devueltas al Estado después de su uso. El diputado del PS no ha especificado el número de nuevas licencias que se extenderán, pero confía en que la oferta cree la demanda por esta profesión.

Con el fin de facilitar este acceso, se creará un estatus de "gestión de arrendamiento" para que conductores que actualmente alquilan una licencia puedan reducir sus gastos.

El resto de la propuesta de ley se centra en Uber, Allocab y otras aplicaciones telemáticas que con solo unos clics ofrecen coches con chofer a reducidos precios sin que el conductor posea licencia.

El texto exige que, en adelante, los coches que ofrecen estos servicios estén matriculados a nivel nacional o local y no podrán captar clientes vía geolocalización (reservada a los taxis) sino que sus reservas deberán efectuarse con antelación.

Por último, las matriculaciones de VTC sólo podrán concederse a los conductores con una certificación profesional y a empresas con capacidad financiera.

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