"Al igual que el ataque a la embajada británica previamente, esto fue contra el país (Irán) y el islam, y no me gustó", añadió.
La embajada del Reino Unido en Teherán fue atacada en 2011.
El asalto a la embajada saudí, por el que fueron detenidas unas 140 personas, según medios locales, llevó a Riad a romper sus relaciones diplomáticas con Teherán.
El incidente se produjo horas después de la ejecución en Arabia Saudita de Nimr al Nimr, un importante líder chiita, la confesión mayoritaria en Irán.
El presidente Hasan Rohani y varios altos cargos de la República Islámica condenaron rápidamente el ataque.
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