Hollande y Peña Nieto aparcan el contencioso por Cassez, en manos del Supremo

  • El jefe del Estado de Francia, François Hollande, y el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, decidieron aparcar el contencioso por el caso Florence Cassez, que tendrá un tratamiento estrictamente judicial, y se centraron en sentar las bases para reforzar la relación bilateral.

París, 17 oct.- El jefe del Estado de Francia, François Hollande, y el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, decidieron aparcar el contencioso por el caso Florence Cassez, que tendrá un tratamiento estrictamente judicial, y se centraron en sentar las bases para reforzar la relación bilateral.

Tras un almuerzo hoy en el Palacio del Elíseo de París, Peña Nieto fue quien abordó el asunto de Cassez en una breve comparecencia conjunta ante los medios de comunicación -sin preguntas-, en la que se comprometió a ajustarse al veredicto de la Suprema Corte de Justicia de su país, lo que excluye cualquier intervención política.

"Seré absoluta y estrictamente respetuoso de la decisión que, apegada a derecho, tome la Suprema Corte de Justicia", anticipó antes de pedir que este asunto, que como remarcó "empantanó" las relaciones entre ambos países, las deje de marcar en el futuro.

Hollande, que agradeció en primer lugar "la franqueza y la delicadeza" con la que Peña Nieto había abordado "la situación dolorosa de Florence Cassez", que cumple una condena de 60 años en México por secuestro, entre otros delitos, aunque ella se ha declarado inocente desde su encarcelamiento en 2005 y tiene ahora pendiente su recurso ante el Supremo.

Hollande se felicitó de que el nuevo presidente de México se haya fijado como principios de actuación con esta compatriota los de la independencia judicial, que "son también los de Francia".

Tras constatar que la suerte de Cassez "está en manos de la justicia mexicana y sólo en sus manos", concluyó que Peña Nieto ha contribuido al "relanzamiento de las relaciones" entre ambos países.

Un relanzamiento que se concreta en primer lugar con "una nueva alianza estratégica" centrada en el medio ambiente y en el desarrollo, temas particularmente queridos por quien el próximo 1 de diciembre va a asumir la jefatura del Estado en México.

Peña Nieto dijo que también habían estudiado la creación de "un consejo de alto nivel", con participación de funcionarios y de representantes del sector privado, para "explorar las muchas ventanas de oportunidades" de negocios.

Hollande precisó que ambos quieren favorecer la constitución entre las empresas de los dos países de "grupos de trabajo", en particular en los sectores de la energía y del transporte.

Esta tarde está previsto que el presidente electo de México se entreviste con "líderes empresariales de Francia", en el último acto de esta primera de las dos jornadas en París, en el marco de su gira europea.

El fin del contencioso diplomático por Florence Cassez también debería servir para reactivar la cooperación cultural, muy maltrecha con la anulación en 2011 del año de México en Francia, decidida por el entonces presidente francés, el conservador Nicolas Sarkozy, que quiso dedicarlo a su compatriota encarcelada.

Hollande dijo que ahí hay "una verdadera obligación" de resultados, y que la idea que salió del encuentro de hoy es "relanzar una iniciativa cultural".

Peña Nieto aprovechó su paso por el Elíseo para solicitar a Hollande "cooperación" para "encontrar un diseño propio a la Gendarmería Nacional" tomando como referente este mismo cuerpo policial francés.

El presidente francés le ofreció "toda la cooperación necesaria" con la Gendarmería, que se ha marcado el objetivo de reforzar su presencia territorial en las áreas rurales y en pequeñas ciudades.

Otra ilustración de la buena sintonía entre los dos mandatarios es que Hollande aceptó la invitación de Peña Nieto para una visita a México en 2014, que coincidirá con el 50 aniversario de la que en 1964 hizo el entonces presidente francés, el general Charles de Gaulle.

El presidente electo de México prosigue mañana su actividad en París con un encuentro en la sede de la UNESCO con su directora general, Irina Bokova, y con varios encuentros de trabajo en la sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

En la OCDE -donde su secretario general no es otro que el exministro mexicano Ángel Gurría-, pronunciará un discurso sobre los cambios en México y su papel en el panorama global y hará un resumen y balance de su gira ante los medios de comunicación. EFE

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