Madrid, 23 dic.- La organización profesional de magistrados Jueces para la Democracia considera que el presidente del Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, ha convertido el órgano de gobierno de los jueces en "un instrumento del poder político".
En concreto, la organización se refiere a casos como el concurso convocado por el CGPJ de la plaza ocupada por el juez Pablo Ruz, instructor del Caso Gurtel en la Audiencia Nacional.
La "indisimulada cercanía política" de Lesmes "explica silencios clamorosos del CGPJ en momentos en los que los integrantes del poder judicial han sido atacados en su independencia. También explica actuaciones poco comprensibles, como la decisión de no reforzar la estabilidad del magistrado Pablo Ruz cuando ha sido cuestionado desde el poder político", señala JpD.
La citada asociación hace estas afirmaciones en un comunicado divulgado hoy en el que hace balance del primer año de mandato de Carlos Lesmes, elegido por la mayoría conservadora de miembros del Poder Judicial para presidir este órgano y el Supremo.
Carlos Lesmes fue nombrado tras un pacto previo entre las dos fuerzas políticas mayoritarias en el que prevaleció la propuesta conservadora, recuerda JpD en el comunicado.
JpD alude así mismo a la reciente reforma del CGPJ que dividió los vocales entre los que tienen dedicación completa en la Comisión Permanente y quienes sólo acuden a sus comisiones o al pleno, pero deben además hacer frente a otras tareas.
"Esta división entre vocales de primera y de segunda ha contribuido a erosionar el carácter colegiado que debe tener la institución y ha favorecido el creciente presidencialismo del presidente, Carlos Lesmes, en detrimento de la democracia interna del CGPJ", señala el comunicado.
"La notoria proximidad del presidente del CGPJ al poder político ha sido un factor clave para entender la incapacidad de la institución para reclamar al poder ejecutivo medios suficientes para nuestros juzgados y tribunales, ante una situación alarmante en la que cerca de la mitad se encuentran saturados y trabajando a más del 150 % de las previsiones oficiales", añade.
"Esta pasividad resulta especialmente grave ante la situación de expectativa de destino de las dos últimas promociones incorporadas a la carrera, que se encuentran en una situación de interinidad impropia de quienes ejercen funciones de un poder del Estado", dice también.
"El progresivo presidencialismo del CGPJ resulta contrario al carácter democrático, plural y colegiado que establece el texto constitucional. Y se va a agravar ante los incumplimientos de la propia ley vigente, pues ya se ha vulnerado el mandato legal de renovar la Comisión Permanente de forma anual y de procurar la rotación de sus miembros", dice también.
"La intención de Carlos Lesmes de no modificar la comisión del CGPJ en la que ha podido concentrar todo su poder es otro signo preocupante de la deriva de la institución, que se ha convertido en un mero instrumento al servicio del poder político".
"En este negativo balance de un primer año de gestión, reclamamos un CGPJ que ejerza de verdad sus funciones constitucionales en defensa de la división de poderes y de la independencia judicial", concluye.
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