La Cámara vasca guarda silencio por el asesinato de dos mujeres en Bizkaia

  • El Parlamento Vasco ha condenado hoy la muerte ayer de dos mujeres en Abadiño (Bizkaia) y ha guardado un minuto de silencio por este doble "asesinato" cometido por el marido y yerno de las víctimas, que ha confesado el crimen.

Vitoria, 11 dic.- El Parlamento Vasco ha condenado hoy la muerte ayer de dos mujeres en Abadiño (Bizkaia) y ha guardado un minuto de silencio por este doble "asesinato" cometido por el marido y yerno de las víctimas, que ha confesado el crimen.

Este acto ha tenido lugar al inicio del pleno que hoy celebra la Cámara vasca, después de que el hombre detenido ayer como presunto homicida de su esposa y de su suegra reconociera la autoría de ambas muertes así como haber simulado el asalto a su carpintería, a la que prendió fuego.

Aunque la Ertzaintza no ha confirmado aún que se trate de un caso de violencia machista, la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejería, ha leído una declaración institucional que expresa la "más enérgica condena" de la Cámara por este "presunto episodio de violencia contra las mujeres".

"Entendemos que la violencia sexista es la expresión más grave de las desigualdades entre mujeres y hombres, derivadas de relaciones de poder y de sometimiento de las mujeres".

Tras mostrar su "apoyo y condolencia" a los familiares y allegados de las víctimas, el Parlamento insta a las instituciones a desarrollar "planes integrales dotados de los recursos necesarios" para lograr la definitiva desaparición de la violencia machista y que no se vuelvan a producir asesinatos como los que han costado la vida a Mari Luz Alejo y Amelia Rodríguez.

También pide a los ciudadanos que adopten "compromisos personales y colectivos a favor de la igualdad entre mujeres y hombres".

La Ertzaintza prosigue con la investigación de este caso para determinar el móvil del asesinato de las dos mujeres, cuyos cadáveres fueron encontrados en la cama de su domicilio de Abadiño con evidentes signos de violencia.

El detenido apareció golpeado y atado por los pies colgado de un montacargas en su carpintería de madera y aluminio de Atxondo, que atravesaba por dificultades económicas.

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