La CEOE achaca a los salarios y al coste del despido la destrucción de empleo

Madrid.- La CEOE, en pleno proceso de negociación colectiva, insiste en que los salarios y el elevado coste de los despidos son los culpables de que la destrucción de empleo en España sea mucho mayor que en el resto de los países de la Unión Europea.

Así lo aseveró el presidente de la Comisión de Economía de la patronal, José Luis Feito, quien, además, calificó de "falacias" algunas ideas que hay sobre el mercado laboral, como la necesidad de un cambio de modelo productivo.

Por ello, y ante la negociación colectiva que actualmente negocian la CEOE y los sindicatos, Feito considera que para este año y 2011, la evolución del empleo en España dependerá de la situación económica y de cómo se comporten los costes salariales reales ya que, advirtió, si aumentan, el empleo crecerá menos.

Así lo aseguró en la jornada "Los desafíos del mercado laboral en España" organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y la Fundación Rafael del Pino, en la que también participaron el presidente de Sagardoy Abogados, Juan Antonio Sagardoy, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado.

En 2009 el incremento salarial medio en España fue del 2,6%, según datos del Ministerio de Trabajo, mientras que el año cerró con una inflación del 0,8%, lo que hizo que los salarios crecieran 1,8 puntos más que los precios.

No obstante, hubo 86.000 trabajadores que tuvieron que devolver parte del salario recibido como consecuencia de la aplicación a la baja de las cláusulas de revisión salarial.

La estructura de la negociación colectiva es una de las causas que, según Feito, influyen en el aumento de los costes laborales, ya que incluyen una indización de salarios que no tienen en cuenta ni la inflación ni la situación económica "sea cual sea".

El directivo de la CEOE calificó de "falacias" algunas ideas que hay sobre el mercado laboral, como la necesidad de un cambio de modelo productivo, ya que parece "que suena agradable" que se deba "tocar todo" excepto el mercado de trabajo.

Por el contrario, Toxo se mostró partidario de sentar las bases de un nuevo modelo de crecimiento para los próximos 30 años, con un menor peso de la construcción, consensuado entre patronal y sindicatos, algo que el Gobierno "debería entender".

El dirigente sindical abogó por un pacto salarial para cuatro años, dentro de la negociación colectiva, una vez pasadas las elecciones generales, para desvincularlo del ciclo político y asociarlo al económico.

Frente a las afirmaciones de Feito, Toxo calificó de "disparate" que haya quienes insistan en reformas que impliquen un abaratamiento del factor trabajo o pongan en cuestión el sistema de protección social, al tiempo que apostó por moderar el crecimiento de los beneficios empresariales.

Por su parte, Sagardoy defendió una reforma laboral "de emergencia" que dure un año o un año y medio con un contrato único con 20 días por año trabajado como indemnización por despido, que "anime" a la contratación y que "en absoluto" se trataría de un "contrato basura".

Posteriormente, dijo, se debería acometer una reforma estructural que incluyese el concepto de "flexiseguridad", para que los empresarios puedan contratar o despedir con facilidad, "lo que -aseveró- no supone abaratar el despido".

El secretario de Estado de Seguridad Social no se refirió a las declaraciones de Feito pero achacó la alta tasa de paro en España a diversas causas consecuencia de los factores diferenciales de la economía española respecto a la de otros países.

Entre ellas citó la temporalidad de sectores, como el agrario, donde 850.000 personas trabajan entre 90 y 120 jornadas al año o la hostelería, donde más de un millón de trabajadores están ocupados de seis a ocho meses al año.