La ONU reparte alimentos, agua y medicinas en Misrata, asediada por Gadafi

Ginebra.- Naciones Unidas comenzó hoy a descargar en el puerto de la ciudad libia de Misrata los alimentos, el agua y los medicamentos enviados en un barco a esa ciudad, asediada por las fuerzas de Muamar al Gadafi desde hace varias semanas.

"El barco es el primer soplo de esperanza para una población que está sufriendo de forma alarmante y que vive bajo las bombas desde hace semanas", señaló en rueda de prensa Elisabeth Byrs, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA).

Misrata, a 200 kilómetros al este de Trípoli, ha sido bombardeada por las fuerzas de Gadafi y, como consecuencia, sus habitantes carecen de agua potable, comida y medicinas.

El barco fletado por el Programa Mundial de Alimentos (PAM) transporta 600 toneladas de comida, suficiente para alimentar a unas 40.000 personas durante un mes.

También se están descargando 500 toneladas de harina de trigo, 50 toneladas de aceite vegetal y 80 toneladas de galletas energéticas.

El personal local del PAM distribuye además 100 toneladas de agua embotellada.

En el barco viajaban un médico y una enfermera de la Unión Médica Árabe, que intentarán ayudar a "un número indeterminado de heridos", especificó la portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Fadéla Chaib.

Los dos sanitarios llevan material "con todo lo necesario para organizar un hospital de base", que servirá para atender a unas 50.000 personas, y pondrán en marcha diez equipos quirúrgicos, especificó Chaib.

El navío transporta también 28 toneladas de material especial para la atención de niños y mujeres embarazadas, como equipos quirúrgicos y obstétricos, entregados por Unicef.

"Los niños necesitan abstraerse de lo que está pasando. Por eso vamos a repartir juguetes y material didáctico para que se distraigan y sobre todo, para que se queden dentro de sus casas, y así evitar que sean víctimas de las bombas o de los disparos de francotiradores", señaló Marixie Mercado, portavoz de Unicef.

Las tareas de descarga del barco durarán tres o cuatro días, precisó el PAM.