Los mandatarios mundiales ya comienzan a llegar a la ciudad de Brisbane, donde se celebra la cumbre de los líderes del G20, una cita en la que el horizonte económico de todos los países se pone encima de la mesa. En esta ocasión España será el país invitado, Mariano Rajoy ya se ha desplazado hasta la urbe australiana y, segúnel Gobierno, el G20, por boca de la presidencia de turno australiana, ha pedido al jefe del Ejecutivo que exponga en esa sesión la experiencia española tras el "impresionante programa de reformas y de empleo" de España.
La presidencia de turno, en esta ocasión, corresponde al primer ministro australiano, Tony Abott, que será el anfitrión en una cumbre en la que habrá marcadas ausencias como la de Cristina Fernández de Kirchner, que no puede viajar por una enfermedad intestinal.
Hay cinco palabras clave en esta reunión, a saber: infraestructuras, comercio, competencia, empleo y desarrollo, aunque esto no evita que los temas de política internacional y los conflictos sean parte de las discusiones de la reunión de los 19 más la Unión Europea.
Según los datos que maneja la institución, el empleo global se emplaza 62 millones por debajo de lo que las tendencias previas a la crisis indicaban. Además las organizaciones pronostican que el crecimiento mundial de este año será de en torno al 4,7% y no del 6% de las tres décadas previas a la recesión.
No obstante en Europa no son todo malas noticias, pues este viernes se conocían los datos de crecimiento de dos de las potencias clave, Francia y Reino Unido, que crecieron un 0,1 y un 0,3%, mientras que el conjunto global de la Eurozona esquiva de nuevo la recesión al crecer un 0,2%.
El crecimiento es uno de los objetivos clave de esta nueva cumbre del G20, una cita que ya llevaba preparados sus postulados desde la anterior cumbre celebrada en 2013 en San Petersburgo. Pero hay uno que los expertos señalan como clave en la misma historia de la reunión,elevarel nivel de la producción económica del G20 en al menos 2 por cientopor encima de las proyecciones existentes durante los próximos cinco años. Esta es considerada como una de las grandes metas dentro de la agenda oficial.
Las acciones que quieren impulsar desde la cumbre de mandatarios pasan por aumentar la inversión, incrementar el empleo (preocupa sobre todo el de los jóvenes) y la participación laboral, realzar el comercio y promover la competencia.
La corrupción es uno puntos más importantes de la cita, pues la institución cifra en que si la corrupción en sí misma fuera una industria, sería la tercera más larga del mundo y llegaría a alcanzar los tres trillones de dólares y supondría un 5% del PIB global.Ébola, Estado Islámico y Medio Ambiente, otros puntos de la agenda
Otros puntos a tratar, como no puede ser de otro modo, versarán sobre las actuaciones de los líderes para frenar el avance del Estado Islámico. La expansión del virus del ébola también es clave en la reunión de mandatarios y el medio ambiente, otra de las claves para estudiar este fin de semana.
La obligación de las multinacionales de pagar impuestos en los países donde generan ganancias y al reformas al sistema financiero son oLa expansión tras dos patas del horizonte de medidas.
La infraestructuras también están en la agenda: "Es vital que nosotros, los bancos multilaterales, trabajemos juntos para afrontar la brecha en infraestructuras de un billón de dólares, en las economías emergentes y en vías de desarrollo", señaló el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim.
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