Líbano detecta un posible caso de polio ante el temor a contagio desde Siria

Beirut, 26 oct.- El Líbano ha detectado un posible caso de poliomelitis en medio de los temores de que esta enfermedad contagiosa se propague desde Siria, donde la Organización Mundial de la Salud (OMS) sospecha que hay una epidemia.

Una niña siria de dos años y medio que vive con su madre en la región fronteriza de Wadi Jaled, en el norte del Líbano, sufre parálisis, uno de los síntomas de la polio, informó hoy la agencia nacional de noticias libanesa ANN.

La familia de la pequeña, que vive en condiciones precarias, no puede sufragar los gastos médicos necesarios y ha pedido ayuda a las autoridades, según la agencia.

La noticia de este caso se produce después de que ayer el ministro saliente de Salud Pública, Ali Jalil, anunciara el lanzamiento de una campaña de vacunación antipolio en cooperación con la OMS y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF).

"La campaña tiene por objetivo vacunar a los 700.000 niños que se encuentran en territorio libanés, incluidos palestinos y sirios, para prevenir cualquier propagación", dijo Jalil en una rueda de prensa.

En su último informe, el Alto Comisionado de la ONU para los refugiados (ACNUR) indicó que mas de 800.000 sirios se han refugiado en el Líbano desde que comenzó la crisis en su país, en marzo de 2011.

A esto hay que sumar mas de 60.000 refugiados palestinos que tuvieron que huir de Siria a causa de la violencia en ese país.

Ayer, la OMS afirmó que al menos 22 personas sufren de parálisis, síntoma de varios virus, entre ellos la poliomielitis, en la provincia de Deir al Zur, en el este de Siria, y que la mayoría de ellas eran menores de dos años.

La poliomielitis es una enfermedad infecciosa grave y muy contagiosa, provocada por un virus que invade el sistema nervioso. La enfermedad se manifiesta primero con síntomas que recuerdan la gripe, pero evoluciona provocando una parálisis irreversible o la muerte.

La poliomielitis había sido erradicada de Siria hace 14 años, mientras que ningún caso ha sido confirmado aún en el Líbano, donde muchos refugiados sirios viven en condiciones precarias y en zonas fronterizas.