Madrid, 5 jun.- La Coalición de Creadores y el Instituto Autor han insistido hoy en pedir que la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual, que se encuentra en fase de enmiendas en el Congreso, agilice los plazos para el bloqueo de páginas de descargas de contenidos piratas y que esta medida "no sea el último recurso".
Las directoras de la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos y del Instituto Autor, Carlota Navarrete y Adriana Moscoso, respectivamente, han confiado hoy en que en la tramitación parlamentaria de la reforma el proyecto de ley sea modificado ya que consideran que no cubre los objetivos de lucha contra la piratería.
Navarrete y Moscoso han presentado hoy un estudio editado por la Fundación SGAE que analiza comparativamente las normativas de 14 países en materia de lucha contra la vulneración de contenidos protegidos por derechos de autor en el entorno digital, una materia en la que, han indicado, "todo el mundo nos ha tomado la delantera".
En la presentación ha participado también el consejero económico de la Embajada de Estados Unidos en España, Antón Smith, que, tras reconocer que han existido diferencias entre ambos países en relación con la lucha contra la piratería, ha expresado el apoyo de su Gobierno al proyecto de reforma.
Para la agilización de los plazos, Navarrete ha destacado la necesidad de dotar de más recursos a la Sección Segunda de la Comisión de Propiedad Intelectual (CPI) que, dependiente del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, es la competente, un órgano que en la actualidad "es lento, sin medios, y ha provocado más complejidad" al procedimiento.
"Hace falta simplificar", ha recalcado la responsable de la Coalición de Creadores, que ha subrayado también que es necesario clarificar el texto del proyecto, "lleno de términos ambiguos e indeterminados" y garantizar que la composición de la CPI sea independiente
El estudio presentado hoy bajo el título "Mapa mundial de las leyes para la protección de la propiedad intelectual en el entorno digital" ofrece una "verdadera cartografía" de las legislaciones nacionales e internacionales existentes en esta materia y su aplicación en los tribunales.
Entre ellas, analiza la Ley de Derechos de Autor del Milenio Digital aprobada en 1998 en Estados Unidos, referente para muchas legislaciones posteriores entre ellas la de la Unión Europea; la ley francesa, la británica, la sueca, la rusa, varias de América Latina y Corea del Sur.
Así, mientras la legislación francesa apuesta por la pedagogía y sanciones basadas en una respuesta gradual, la alemana persigue a los que descargan contenidos de forma ilegal con ánimo de lucro pero también impone multas a los usuarios.
Del análisis de estas normativas se desprende, ha señalado la responsable del Instituto Autor, que las propuestas más efectivas son las que promueven la cooperación entre los titulares de derechos de autor y los usuarios y proveedores de servicios, además de las que apuestan por una labor de concienciación con medidas educativas y disuasorias.
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