Los últimos rifirrafes entre Aguirre y Cobo agrandan el "hartazgo" en el PP

Madrid.- El exabrupto que un micrófono abierto robó a la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, y el posterior cruce de declaraciones entre ella y el número dos en el Ayuntamiento de la capital, Manuel Cobo, han acentuado aún más el "hartazgo" en el PP hacia sus compañeros de filas en Madrid.

Fuentes de la cúpula del Partido Popular han manifestado esta sensación de "hartazgo y cansancio" unos días después de que un micrófono captara el insulto que Aguirre dirigió a, supuestamente, un ex cargo de Caja Madrid afín al alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, Fernando Serrano.

Éste ha abandonado el Consejo de Administración en la nueva composición que desde hace días preside el ex ministro Rodrigo Rato, la apuesta del líder del PP, Mariano Rajoy, y su lugar lo ha ocupado Rubén Cruz en representación de IU.

Aguirre se refirió a este hecho así, mientras hablaba con su vicepresidente, Ignacio González: "Yo creo que nosotros hemos tenido la inmensa suerte de poderle dar un puesto a IU quitándoselo al hijo puta".

La presidenta se disculpó en público poco rato después, pero al día siguiente el vicealcalde de Madrid, mano derecha de Gallardón, aseguraba: "No quiero pensar en lo que habría ocurrido si esas declaraciones las hubiera hecho yo mismo o Alberto Ruiz-Gallardón".

Con todo, destacó que a él no le correspondía opinar sobre si el exabrupto de Aguirre era merecedor de una apertura de expediente.

Este cruce de declaraciones se produjo casi en paralelo al que provocó la propuesta de sanción a Cobo por haber criticado al Gobierno de Aguirre en una entrevista en el diario "El País", hace unos meses.

El instructor del expediente que se abrió a Cobo por esa actuación planteó sancionarle con un año de suspensión de militancia, aunque revisable a la baja.

Cobo, no obstante, está suspendido cautelarmente desde noviembre, aunque permanece en su cargo en el consistorio madrileño.

Aunque acató el planteamiento de sanción del Comité de Derechos y Garantías del PP, el vicealcalde de Madrid aseguró que no tenía intención de abandonar su puesto.

Sin embargo, primero Ignacio González, para quien la sanción a Cobo "pesará" en la confección de las listas para las elecciones de 2011, y luego Aguirre, quien no vería "normal" que el número dos de Gallardón figurase en la candidatura del PP al Ayuntamiento de Madrid, dejaron clara la posición del Gobierno autonómico al respecto.

El enfrentamiento entre los sectores de Aguirre y Gallardón viene de lejos: al menos tres ejemplos se han sucedido en un año.

Primero fueron los supuestos casos de espionaje, en los que Cobo sería uno de los afectados; después la batalla por Caja Madrid y ahora este rifirrafe, también con la renovación de la entidad financiera como telón de fondo.

La disputa por la Presidencia de la caja de ahorros llegó a tal extremo que Rajoy convocó en noviembre pasado un Comité Ejecutivo para poner fin a más "espectáculos bochornosos" y para recordar que, como presidente del partido, es responsable de las listas electorales.

La secretaria general, María Dolores De Cospedal, ha ratificado hoy estas palabras de entonces de Rajoy y ha indicado que no se contempla de momento la apertura de un expediente a Aguirre.

Fuentes de la plana mayor de los populares, preguntados por Efe por este caso, han incidido en que el "hartazgo" es ya "considerable" en "todo el partido, en toda España".

Con todo, estas mismas fuentes dan por hecho que no habrá medidas drásticas desde la dirección nacional.