La Comunidad de Madrid ha descartado vacunar a las 40.000 personas que van a estar en los colegios electorales el próximo 4 de mayo, día de las elecciones autonómicas, al estar recibiendo las vacunas "en poca cantidad" y tener otros grupos prioritarios fijados por el Ministerio para administrarlas. En la presentación de las medidas preventivas en materia de salud pública frente a la Covid-19 para las elecciones, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha explicado este jueves que la Comunidad de Madrid se podría haber planteado la vacunación del personal de los colegios electorales "en un entorno de abundancia de vacunas".
Sin embargo, ha descartado esta opción por el "escaso" número de dosis que está recibiendo la región, por las prioridades establecidas por el Ministerio de Sanidad para administrar la vacuna y por el "bajo" grado de inmunización que tendrían el día de la votación las personas. En el supuesto de que se hubiera adoptado esta decisión, ha apuntado el consejero, no solo se tendría que haber vacunado a los miembros de las mesas, sino a todo el personal de los colegios electorales, unas 40.000 personas.
El titular de Sanidad ha apelado a la responsabilidad individual para que el 4 de mayo todos los madrileños puedan ejercer el derecho de participación y de sufragio con las garantías que requiere. La Comunidad de Madrid está "una fase de meseta" o de "estabilidad" desde el punto epidemiológico y los indicadores asistenciales se encuentran "en descenso", ha comentado. La incidencia acumulada de coronavirus a catorce días por cada 100.000 habitantes está en 225 casos, y la incidencia acumulada a siete días por cada 100.000 habitantes se sitúa en 112 casos.
Ruiz Escudero ha mostrado su deseo de que el cierre perimetral con motivo del puente de San José (del 17 al 21 de marzo) "no tenga mucha repercusión" sobre la incidencia acumulada de los contagios en la región de Madrid, aunque ha manifestado que "las veces que se ha hecho ese cierre perimetral nunca nos ha traído buenas noticias". "Hemos tenido que cumplir esa orden del Consejo Interterritorial, que no se adoptó por unanimidad, porque tuvo el voto en contra de la Comunidad de Madrid y, a partir de ahí, nuestra misión es monitorizar, seguir, valorar y tomar las decisiones que creamos convenientes", ha asegurado.
