Los manteros pegaron a un urbano, según el informe de la operación tras la que se personó Garganté

Varios manteros agredieron a un agente de la Guardia Urbana durante la operación contra el 'top manta' la tarde del miércoles 23 de marzo en La Rambla del Barcelona tras la que se personó en el ambulatorio el concejal de la CUP en el Ayuntamiento Josep Garganté, según el atestado policial de la intervención al que ha tenido acceso Europa Press.

Fue en este centro médico en el que se presentó Garganté, "que se identificó mediante documento del Ayuntamiento en calidad de regidor" y que dijo que había ido para acompañar a los identificados, según el atestado.

Aunque el informe policial no recoge la conversación del concejal con el médico, el sanitario denunció que Garganté lo había coaccionado para modificar el informe de lesiones del mantero con el fin de atribuirlas a una agresión de la Guardia Urbana, por lo que el concejal será juzgado el 22 de abril.

EL ATESTADO POLICIAL

El atestado de la intervención policial relata que cuando el policía trataba de dar alcance a varios vendedores, un grupo de manteros, "al ver que uno de ellos iba a ser alcanzado, se abalanzó agresivamente contra el agente" y precipitó su caída por las escaleras de acceso a la estación de Metro de Drassanes.

Este urbano "recibió numerosos golpes por parte de diversos vendedores ambulantes, tanto durante su caída por las escaleras como una vez quedó en el suelo", tras lo que varios compañeros acudieron para evitar que los vendedores continuaran con la agresión.

El agente fue trasladado a la mútua, donde fue asistido por las lesiones sufridas pero no necesitó coger la baja laboral, según el atestado.

Los policías consiguieron abandonar el lugar --la entrada a la estación del Metro-- "mientras eran increpados de forma agresiva por los vendedores, quienes empezaron a coger objetivos y lanzarlos contra los agentes".

LANZAMIENTO DE PIEDRAS

"El grupo de vendedores prosiguió gritando y lanzando piedras y objetivos diversos contra los agentes, haciendo ademanes de salir a la vía pública de forma amenazadora", sostiene el informe elaborado por los urbanos horas después de la intervención.

Según esta versión, en su huída el grupo de manteros también lesionó a dos viandantes que "fueron arrolladas y pisadas por los vendedores, los que en ningún momento trataron ni de ayudarlas a levantarse".

Uno de los agentes observó como uno de los vendedores "era portado en volandas por otras cuatro personas" en dirección al centro médico PereCamps, y que presentaba una inflamación en el tobillo, pero el atestado no recoge cómo el mantero se hizo esa lesión.

Según el informe policial, los agentes de la Guardia Urbana ofrecieron asistencia al mantero pero la rechazó de forma alterada.