Morenés aclara que "no hay ninguna decisión tomada" sobre la academia de suboficiales de talarn

El ministro de Defensa, Pedro Morenés, aseguró hoy que todavía "no hay ninguna decisión tomada" sobre el hipotético cierre de la Academia General Básica de Suboficiales de Talarn (Lleida), si bien el estudio para maximizar los recursos disponibles también incluye a este centro.
Morenés respondió en este sentido por dos veces en la sesión de control al Gobierno en el Senado, a sendas preguntas que le formularon, sucesivamente, el senador de la Entesa Catalana de Progrès Francisco Boya y la senadora de CiU María Teresa Rivero.
Boya le preguntó directamente si el Ministerio tiene previsto cerrar la academia de Talarn al terminar este curso, a lo que Morenés respondió recordando que su departamento "está procediendo a la evaluación de los recursos disponibles" de acuerdo con los presupuestos para 2012 y que dicho estudio "incluye todas las actividades y medios y también los programas de formación del personal militar".
Así, señaló que ha pedido a los mandos de los tres ejércitos que sopesen cuáles son las instalaciones militares "absolutamente necesarias" y cómo mantener también "las que son de interés para la defensa, como es éste el caso". Pero aclaró que todavía "no hay decisión definitiva" al respecto.
El senador catalán volvió a la carga replicando que "tras las decisiones hay territorios y hay personas", y que aquéllas se toman habitualmente lejos de éstos últimos. Así, denunció que los alcaldes de la comarca del Pallars, donde se ubica la academia, se enteraron por los periódicos locales de la presunta intención del Ministerio de cerrarla, cuando hay 800 personas cuyo sustento depende de esta actividad.
"No pueden irse del Pallars por la puerta de atrás y dando un portazo", le repitió por dos veces, exigiendo a las administraciones públicas que sean fieles al principio de responsabilidad social que se aplica a las empresas y refiriéndose al Talarn como la última instalación militar en Cataluña.
Morenés desmintió esta última apreciación recordando el cuartel del Bruc, cuyo desmantelamiento es una vieja reivindicación de los nacionalistas, y reiteró que "en ningun momento" el Ministerio ha tomado la decision de dejar el Talarn.
Al contrario, aseguró que sólo ha preguntado al jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra cuáles son las instalaciones que considera de prioridad. "En función de los recursos que haya disponibles el Gobierno tratará de mantener el Talarn con las capacidades que pueda mantener allí", concluyó.
PREGUNTA DE CiU
Por su parte, Rivero comenzó denunciando la "cantidad de despropósitos y poca concreción" que ha habido en torno al futuro del Talarn, debido a las insinuaciones de la delegada del Gobierno en Lérida sobre un cierre próximo del centro. Además, se mostró convencida de que Morenés conocía el estudio encargado por su predecesora, Carme Chacón, que ya contemplaba ese cierre.
Como el senador de la Entesa, la de CiU también hizo un paralelo con las empresas privadas al exigir al Ministerio que, igual que las multinacionales que se deslocalizan, prepare "un plan social que dé respuesta a la cantidad de puestos que se van a perder" y busque medidas compensatorias porque, "una vez más", tanto socialistas como populares "dejan al territorio en la estacada".
Morenés acusó a Rivero de hacer "un juicio de intenciones" y, distanciándose del "lío" de rumores generado, le aseguró, como a Boya, que "la decisión sobre el Talarn no está tomada", sino que él se ha limitado a pedir información.
El ministro de Defensa terminó diciendo que "desde hace 37 años, el Gobierno y las Fuerzas Armadas se han preocupado mucho más por el Talarn que algunos que ahora nos piden que sigamos preocupándonos por él".