Navarra. El gobierno foral cree que la sentencia del supremo que exonera a la consejera de hacienda "pone fin a una simulación"

El vicepresidente y portavoz del Gobierno de Navarra, Juan Luis Sánchez de Muniain, estima que el archivo por el Tribunal Supremo de las querellas de la Asociación de Consumidores Kontuz y el sindicato ELA contra la presidenta, Yolanda Barcina, y su consejera de Hacienda, Lourdes Goicoechea, "pone fin a una simulación", la que se orquestó por las supuestas irregularidades de su gestión.
Sánchez de Muniain declaró a Servimedia que, con su querella por supuestos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y violación de secretos, estas asociaciones "ligadas a la izquierda abertzale" se propusieron "instrumentalizar a los tribunales para dar resonancia a sus reivindicaciones política", como lo demostraría el que, tras la sentencia, haya "criticado a la Justicia española, no tanto por ser Justicia como por ser española".
El portavoz del Ejecutivo autonómico criticó esta "práctica rechazable" de que presentaran la querella "justo quienes más desprecian a la Justicia", por lo que entiende que el archivo de la misma, al "no revestir caracteres de delito" sus actuaciones, era "previsible".
También le parece que era de esperar que al aclararse la polémica sobre las supuestas irregularidades en la Hacienda foral, que llevó a convocar una comisión de investigación parlamentaria en febrero, "iba a ser fortalecida la imagen del Gobierno de Navarra".
Para Sánchez de Muniain, Barcina y Goicoechea "fueron condenadas de antemano por estos grupos", en referencia a los abertzales, "y por otros", en alusión al Partido Socialista de Navarra, " para justificar una moción de censura que no tenía ninguna justificación". Todos ellos, concluyó, empeñados en "simular unas supuestas actuaciones al margen de la ley que no se han producido".