París y Rabat restablecen su cooperación judicial tras un año de suspensión

París, 31 ene.- Francia y Marruecos anunciaron hoy el restablecimiento de su cooperación judicial, que llevaba casi un año suspendida por decisión de Rabat, gracias a una revisión de su convención bilateral en la materia.

El Ministerio francés de Justicia indicó en un comunicado que este acuerdo es resultado de las reuniones mantenidas el jueves y el viernes por su titular, Christiane Taubira, con su homólogo marroquí, Mustafa Ramid.

Según su gabinete, Taubira y Ramid, "en un espíritu muy constructivo y en un clima de confianza (...) examinaron en profundidad las dificultades que habían conducido a la suspensión de la cooperación judicial".

El resultado es "un texto que enmienda la convención de ayuda judicial franco-marroquí que permite favorecer, de forma duradera, una cooperación más eficaz entre las autoridades judiciales de los dos países y reforzar los intercambios de informaciones, con respeto pleno de su legislación, de sus instituciones judiciales y de sus compromisos internacionales".

No había más precisiones sobre en qué se corregía el texto anterior.

En el origen de la interrupción de la cooperación bilateral a finales de febrero de 2014 estuvo el enfado marroquí por el requerimiento judicial que llevaron a la residencia del embajador marroquí en París policías franceses el 20 de ese mes.

Los agentes querían tomar declaración al jefe del contraespionaje marroquí, Abdelatif Hamuchi, denunciado por presuntas torturas en Francia, lo que según el Gobierno de Rabat significó un atropello a los usos diplomáticos y una "provocación".

Pero el conflicto no quedó ahí, sino que se trasladó a otras esferas, como la policial, ya que la cooperación en el ámbito de la seguridad también se congeló y desde hace meses se ha producido solo con intermediación española, según fuentes diplomáticas.

Al incidente de la residencia del embajador sucedieron otros que sirvieron para alimentar el malestar marroquí, como el minucioso registro por un agente de seguridad en el aeropuerto de París del jefe de la diplomacia marroquí, Salahedín Mezuar, o las palabras del actor español Javier Bardem, que parafraseó a un embajador francés que le había hecho comentarios sobre Marruecos.

Tampoco ayudó el frío respaldo de las autoridades marroquíes a Francia tras los atentados yihadistas de comienzos de este mes en París.

Los titulares de Justicia se esforzaron hoy en dejar atrás todos esos desencuentros y, según el comunicado francés, "se felicitaron" de su compromiso, con el que decidieron el "restablecimiento inmediato de la cooperación judicial y jurídica" entre los dos países, así como la vuelta de los magistrados de enlace.

Más allá de la dimensión judicial, insistieron en que "constituye una contribución suplementaria a la relación densa, fuerte y multidimensional entre los dos países".

En espera de que se confirme oficialmente, medios de Francia y de Marruecos avanzaban hoy que el rey de Marruecos, Mohamed VI, iba a viajar este fin de semana a París.