Portugal refuerza medidas para evitar fraudes en los visados a extranjeros

Lisboa, 19 ene.- El Ministerio de Interior de Portugal anunció hoy una serie de medidas para evitar más casos de fraude en las autorizaciones de residencia a inversores extranjeros, entre ellas unificar los procesos para su concesión.

Interior divulgó hoy una serie de consideraciones dos meses después de haber abierto una investigación por el caso "Laberinto", sobre una trama corrupta en la atribución de visados a grandes inversores extranjeros, que forzó la dimisión del entonces ministro Miguel Macedo.

El caso "Laberinto", que estalló el pasado noviembre, provocó la detención del entonces responsable de Extranjería (SEF, por sus siglas en portugués), Manuel Jarmela Palos, así como a la que era secretaria general del Ministerio de Justicia, Maria Antónia Anes, y el presidente del Instituto de Registros y Notariado, António Figueiredo.

Estos tres altos funcionarios están supuestamente implicados en una trama en la que la Fiscalía portuguesa sospecha que hubo blanqueo de capitales y tráfico de influencias, entre otros delitos.

Para evitar otro caso semejante, Interior quiere promover "un plan nacional de formación para los inspectores y otros funcionarios intervinientes en la tramitación de los procesos de autorización de residencia para actividad de inversión, reagrupamiento familiar y sus renovaciones".

El caso "Laberinto", que salió a la luz el pasado noviembre, a un año de las elecciones legislativas, supuso un golpe para el Gobierno conservador de Pedro Passos Coelho, sobre todo por la dimisión de Miguel Macedo.

Pese a no ser investigado, Macedo decidió dejar su cargo al verse envuelto indirectamente en la trama por su amistad con Figueiredo, supuesto líder de la trama, y por la implicación del responsable del SEF, organismo dependiente de Interior.

Este caso llevó también al Parlamento al número dos del Gobierno, Paulo Portas, quien defendió los beneficios de los visados para inversores extranjeros ("Visados de Oro") que originaron la actual polémica.

El viceprimer ministro Portas negó entonces que fuese una vía para blanquear dinero y aseguró que ha logrado atraer al país 1.107 millones de euros.

Asimismo, consideró que los "Visados de Oro", vigentes desde el 2012 y concedidos en su mayoría a ciudadanos chinos (80 por ciento), han ayudado a dinamizar sectores cruciales para la economía, como la construcción e inmobiliario, sacudidos por la recesión.

No obstante, no logró cuantificar cuántos puestos directos de trabajo se generaron en Portugal gracias a este programa, del que se han beneficiado unos 1.600 inversores extranjeros, sobre todo del sector inmobiliario de lujo.