Reforma del Estatuto del PDI

Castells prepara la regularización de los 20.000 profesores asociados precarios

El Ministerio de Universidades trasladará su propuesta a los agentes implicados este mes. La idea es dar tiempo a los centros para incorporar formalmente a esos docentes.

El ministro de Universidades, Manuel Castells, comparece ante la Comisión de Universidades del Congreso. /EFE/ Emilio Naranjo
Castells prepara la regularización de los 20.000 profesores asociados precarios

La situación de los más de 20.000 profesores asociados que trabajan en precario ya está más cerca de abordarse en el Consejo de Ministros. El Ministerio de Universidades que lidera Manuel Castells ya tiene casi lista su propuesta de Estatuto del Personal Docente e Investigador (PDI), su segundo gran proyecto tras el inicio de la rebaja de tasas. Un vuelco a la regulación sobre los diferentes actores del ámbito académico que estaba prevista para el primer trimestre del año, pero que tuvo que ser apartada de la agenda de prioridades cuando estalló la pandemia de coronavirus. Será ahí donde se ofrezcan soluciones para los miles de docentes sin plaza que trabajan en las facultades por sueldos irrisorios sin contar con otra fuente de ingresos. Y que busca la regularización de su situación y que no continúen percibiendo por esta actividad menos del salario mínimo interprofesional.

Como explican fuentes gubernamentales a La Información, Castells presentará antes de que acabe junio su plan a los agentes implicados en la reforma. Las líneas maestras de la estrategia del ministro pasan por establecer mecanismos para que los profesores asociados, donde algunos cobran tan solo 300 euros por enseñar a los jóvenes, pasen a formar parte de la plantillas de las universidades. Para ello, se tendrán en cuenta ciertos aspectos y requisitos, que van desde la propia formación del docente a su especialidad o los años de experiencia que tiene dando clase. El fin de la propuesta, señalan estas fuentes, es "dignificar la profesión del personal docente e investigador". Pero con los llamados "falsos asociados" como mayor prioridad por lo que respecta a su retribución.

Para llevar a cabo esta regularización, Universidades planteará un sistema de pasarelas donde los docentes que se beneficien de esta medida sean situados en unos u otros puestos y departamentos. La idea es que acaben desempeñando otra figura distinta a la de asociado, y donde será clave, por ejemplo, que el afectado posea o no el doctorado. Pero sobre todo, el objetivo de Castells es satisfacer las demandas de este colectivo y de los sindicatos de acabar con la precarización en los campus. Algo que no afecta tan solo a estos profesores, sino que también alcanza a los investigadores y científicos que desempeñan en las facultades o los centros adscritos. El debate sobre la tasa de reposición y las convocatorias de empleo público también se abordarán en la reforma.

Las fuentes del Ejecutivo consultadas por esta redacción estiman que el documento que presentarán "recoge todas las sensibilidades y es el mejor que podría plantearse". Pero aseguran que escucharán todas las opiniones y posibles correcciones que les planteen sindicatos, rectores o gobiernos autonómicos. Además, destacan que las universidades tendrán el tiempo suficiente para ir incorporando a esos 'falsos asociados' a los puestos que se determinen para ellos. También señalan que el abanico de posibilidades que se pondrán sobre la mesa incluirá numerosas fórmulas, donde destacan el contrato postdoctoral. Una forma de vinculación laboral con la que se prevé que se superen esos "sueldos de miseria" a los que el ministro se refirió en el Congreso en su primera comparecencia ante el Parlamento.

Las nuevas carreras, en pausa

El Ministerio de Universidades también tiene pendiente la nueva Ordenación de las Enseñanzas Oficiales del Sistema Universitario. Esta futura reforma es la que determinará las carreras y los itinerarios de enseñanza de la educación superior, a la vez que establecerá las fórmulas para que un alumno pueda lograr su título. El borrador, que salió a consulta pública a finales de abril, es la antesala de una oleada de cambios que se producirán en el sistema universitario cuando adquiera el carácter de anteproyecto de ley. Entre las novedades estará que se permita a los centros ofrecer programas de Grado con un itinerario académico abierto, lo que significa que un alumno pueda cursar asignaturas de dos o más títulos distintos si todas ellas son básicas para su especialización.

Aun así, este proceso ha estado marcado por varios obstáculos que van más allá de la crisis sanitarias de estos últimos meses. Esta Ordenación implicará la adaptación total al modelo europeo de Bolonia, por lo que se pretende implantar el sistema 3+2, que establecería que los universitarios tendrían que hacer tres años de carrera y dos de máster. Para ello, el Ejecutivo quiere impulsar una rebaja de precios en los posgrados, similar a la que ya ha realizado con las tasas de los créditos de las carreras, para que así no haya que afrontar un coste muy alto en un máster cuando es imprescindible para obtener el título. El problema está en que algunas comunidades autónomas ya han mostrado sus reservas a rebajar las tasas de los mismos, como explican las fuentes gubernamentales consultadas. 

Esto ha provocado que la consulta pública del borrador para cambiar la oferta de estudios vaya a mantenerse abierta sin una fecha de cierre prevista. El Ministerio de Universidades ya ha pedido a todos los interesados en estas modificaciones que continúen mandando sus propuestas y matizaciones al proyecto. Un texto en el que también se recoge el aumento del reconocimiento de créditos por contar con experiencia profesional, al pasar de un 15% al 25%. Otra cuestión que se repensará es el sistema actual de transferencia universitaria (la conexión del estudio con el tejido productivo) para que no se deje fuera a los ámbitos artísticos y de humanidades. Aunque para ello será necesarios varios acuerdos. El primero tendrá que ser con todas las autonomías. Pero quien tendrá que validar las acciones de Castells será el Ministerio de Hacienda.

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