"El gobierno no dejará pasar ni una sola actuación que suponga contravenir la unidad y la soberanía", declaró Mariano Rajoy en una solemne comparecencia televisiva en Madrid mientras el parlamento regional catalán celebraba la sesión de investidura en Barcelona.
A pesar de ser un gobierno saliente tras las elecciones legislativas del 20 de diciembre, Rajoy aseguró que su ejecutivo "sigue contando con los mecanismos que nos brinda la ley y el Estado de derecho para defendernos".
El líder conservador tomó la palabra en un momento de incertidumbre política para el país tras su justa victoria electoral de diciembre, lejos de la mayoría absoluta en un Congreso muy fragmentado.
El conservador Partido Popular de Rajoy obtuvo un 28% de los sufragios y para gobernar necesitará del apoyo o la abstención de otras formaciones que por el momento se niegan.
Después de que los independentistas alcanzaran un acuerdo para investir un nuevo presidente que avance hacia la secesión, Rajoy se puso en contacto con el líder del partido socialista PSOE, Pedro Sánchez, y el presidente de Ciudadanos (centroderecha), Albert Rivera, informó el jefe de gobierno.
Su partido se propone formar una gran alianza con estos dos partidos para formar un gobierno que defiende la unidad del país.
"Los españoles pueden estar tranquilos", declaró Rajoy. "No me faltará fuerza ni determinación para seguir defendiendo la unidad de España", aseveró.
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