La crisis económica fue, y sigue siendo, la principal preocupación del presidente del gobierno, Mariano Rajoy. Tanto que en su balance anual de este viernes, su discurso ha estado centrado casi exclusivamente en el estado de la economía española, que ha asegurado que mejorará en 2014, llevando a que haya "menos parados" inscritos en las oficinas del INEM.
"Si el año 2013 fue el abismo, 2014 será el año del inicio de la recuperación económica en nuestro país",ha declarado con confianza. En este sentido, Rajoy ha insistido en que aunque los niveles de creación de empleo todavía están "lejos" de lo marcado por el Gobierno y que no puede sentirse "satisfecho", "los datos de la Seguridad Social nos permiten aventurar que el crecimiento de cotizantes comenzará a crecer en los próximos meses de forma consistente".
"Hace un año les dije aquí que este año 2013 iba a ser muy duro, sobre todo en sus primeros 6 meses. Pero también les dije que las cosas empezarían a mejorar en la segunda mitad del año.Hoy puedo decir que 2014 será un año mejor, con más actividad y con más crecimiento de la economía,y el año que viene, cuando comparezca ante ustedes, habrá menos personas en paro", ha asegurado. "Tenemos un derecho fundado a la esperanza".
Durante casi la mitad de su comparecencia y antes de pasar al turno de preguntas, en el que se ha consultado al presidente sobre otros temas, Rajoy ha realizado un discurso optimista, casi motivador, en el que ha insistido en que lo peor de la crisis ya ha pasado y en que "hemos dejado atrás la recesión".
Las cifras macroeconómicas, según el jefe de Gobierno, son una evidencia de la mejora. El descenso de la prima de riesgo -que ha supuesto un ahorro de en torno a 8 millones de euros- y el aumento de la inversión extranjera, que ha crecido en un 6,2% durante 2013 según los datos del Ejecutivo, dan cuenta de que "España sigue recuperando la credibilidad que había perdido en los mercados financieros". Será cuestión de tiempo que estos hechos se reflejen en la microeconomía, porque se trata de datos "buenos para todo el mundo", según ha asegurado.Las decisiones del pasado fueron correctas
Los frutos de las reformas se empiezan a notar, y esto implica, según Rajoy, que las decisiones del Gobierno 'popular' fueron correctas. "Lo peor ya ha pasado. Hicimos lo que tuvimos que hacer", ha sentenciado.
El presidente se ha remontado al paquete de "reformas estructurales" del Ejecutivo y enumerado unos cambios que, en su opinión, eran necesarios. La primera gran reforma, según ha explicado, fue el ajuste del gasto de las Administraciones. "Hemos seguido avanzando en el control de las cuentas públicas ajustando los gastos a los ingresos. Los esfuerzos más duros ya los hemos hecho, pero no podemos echar a perder este trabajo", ha comentado.
Rajoy también se ha referido a la importancia de la reforma local -"un proyecto de enorme complejidad que ningún gobierno se atrevió antes a aprobar"-, la reforma del sistema financiero, la reforma laboral -alabada por la OCDE-, la 'Ley Wert', la ley del control de la deuda comercial del sector público, la reforma del sistema de pensiones y su revalorización, la reforma del sector eléctrico, la ley de garantía de la unidad de mercado, la ley de emprendedores y las reformas en medio ambiente y transporte.
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