Rajoy no se ve muerto, calcula los tiempos y confía en que Sánchez fracase

Mariano Rajoy no está muerto, políticamente hablando. El presidente del Gobierno en funciones ha dado la sensación este martes de tener una estrategia perfectamente diseñada. Otra cosa es que acierte, pero no será por tacticismo. Ya lo advirtió Lucía Méndez en El Mundo: la vida política de Rajoy se ha caracterizado por resistir. Y eso es lo que está haciendo ahora.

Después de una reunión con el Rey Felipe VI, que ha durado menos de una hora, el presidente del Gobierno en funciones ha comparecido en el Palacio de la Moncloa para anunciar la decisión que ha tomado. En primer lugar, el monarca no ha propuesto que sea Rajoy quien lidere la formación de Gobierno porque el candidato del PP le ha comunicado que sigue sin contar con los apoyos necesarios para ello.

La táctica de Rajoy es clara: esperar a que Sánchez fracase en su intento de formar Gobierno con Podemos (a los que ha llamado "radicales") y con ERC, por ejemplo, (a quien ha tildado de "independentistas") para que, más tarde, el candidato socialista vea que la única posibilidad que le queda es la de hablar con el PP.

Rajoy, dicen quienes le conocen y trabajan con él, sabe calcular los tiempos. Es un experto tal y como ha demostrado durante mucho tiempo. Por eso es el único presidente del Gobierno que ha llegado a La Moncloa después de dos fracasos consecutivos. En eso es único.

Resistir y volver a resistir, en definitiva. Rajoy cree sinceramente que un Gobierno a la izquierda no es posible. Y ahí estará él. Esperando a que Sánchez 'se la pegue' para que, por fin, se abra a negociar con él. Sólo así es posible explicar el paso a un lado que ha vuelto a dar, dejando la iniciativa a un Sánchez del que Rajoy sabe que se encuentra acorralado entre barones, felipistas y susanistas.

La oferta de Rajoy sigue siendo la misma que el 21D: una coalición PP-PSOE-Ciudadanos. Con él como presidente. No hay otra opción ya que, según repite una y otra vez, le votaron 1,7 millones de españoles más que a Pedro Sánchez, el PP consiguió 7 puntos más que su rival y 33 escaños por encima. Los populares, además, ganaron en 13 comunidades autonómicas y en 39 provincias. Casi nada. Suficiente para Rajoy para no dar un paso a un lado.

¿Y Rajoy volverá a ser candidato? Seguro. No hay dudas. El presidente ha dicho que estamos en un "sistema democrático" y que el PP es un "partido serio". "No vamos a hacer experimentos" y vamos a "respetar la voluntad de los españoles". Ha destacado que más de 7,2 millones de votantes apostaron por él y que no va a vulnerar esa confianza.

Hay Rajoy para rato, por tanto. Quienes le dan por muerto se equivocan. Porque ya lo ha anunciado él mismo: "Hoy no tenemos los apoyos, pero vamos a esperar". Aviso a navegantes: "No renunciamos a presentarnos a la investidura". ¿Cuándo? Cuando Sánchez fracase. Rajoy no tiene prisa.