Rajoy presionará para que el PP europeo apueste más por el empleo juvenil

Una amplia expedición de 30 mandatarios populares acompañará al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el XXII Congreso que el PP europeo celebrará en Dublín los próximos 6 y 7 de marzo. El principal cometido del cónclave es elegir al candidato del partido a presidir la Comisión Europea–puesto que votará Esrasburgo tras las elecciones del 25 de mayo-, aunque también se diseñarán los contenidos básicos del programa electoral.

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Ante eso, Génova ya expuso sus prioridades en la Convención Nacional de Valladolid -18 puntos básicos explicados por la secretaria general, María Dolores de Cospedal-, aunque será en ese Congreso donde se libre la batalla definitiva. Uno de los grandes objetivos es lograr que se apueste por el fomento del "empleo juvenil", tal y como declara a este diario la eurodiputada Teresa Jiménez Becerril, que estará presente en la reunión. Becerril se muestra orgullosa de que ya se lograra de Bruselas un ambicioso plan para afianzar "las garantías juveniles", del que España "fue una de las grandes beneficiadas" y confía en que se avance aún más por ese camino. Además, considera fundamental combatir "la desafección ciudadana por la política" y el auge de las "fuerzas euroescépticas, que están creciendo y quieren cargarse Europa desde dentro". La parlamentaria del PP ve prioritario explicar a los ciudadanos la importancia de la Unión, los detalles "de su manejo" y lo importante que ha sido para el desarrollo económico de España. Muchos ciudadanos no son conscientes de ello y por eso abrazan con más facilidad las opciones radicales.

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"Es fundamental estar por encima del debate nacional, independientemente de que se defiendan los intereses de España en Europa, porque ahora está en juego el propio devenir de la convergencia europea", afirma. Además, Becerril apuesta por "no dejarse arrebatar por el PSOE banderas como las de los derechos y las libertades, de las que el PP europeo es el principal valedor". En cuanto a la inmigración ilegal, tema por el que Moncloa ya ha tenido roces con Bruselas, considera esencial "que no se use como arma política", se aborde "con responsabilidad" y "los países del norte" ayuden más a los del sur, principales afectados. Esta cuestión, concluye, ya se está abordando a nivel parlamentario y debe seguir haciéndose.

Junto a estos temas, Génova subraya que pondrá el énfasis en temas como "la unión fiscal y bancaria", la reducción de trabas burocráticas para "emprendedores y pymes" o el "terrorismo". Además, asegura que el PPE abordará "la crisis en Ucrania", los "desafíos en los Balcanes" y "las relaciones transatlánticas".

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El manifiesto electoral que aprobará el Congreso del PPE marcará el programa con el que los diferentes partidos que lo conforman se presentarán a las elecciones en cada país. En el cónclave intervendrá Rajoy, además de otros once jefes de Estado y de Gobierno, y contará con cerca de 2.400 participantes de 39 países distintos. Al final de la misma, el viernes, los delegados votarán al candidato a suceder a José Manuel Durao Barroso al frente de la Comisión. Los populares españoles aseguran no haber consensuado aún un apoyo definitivo para alguno de los tres postulantes: el exprimer ministro de Luxemburgo y expresidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker–respaldado por la CDU de Merkel-; el exprimer ministro letón, Valdis Dombrovskis; y el actual comisario de Mercado Interior, el francés Michel Barnier.

Esta será la primera vez que los partidos europeos concurran a las elecciones con un candidato a presidir la Comisión, en virtud de lo establecido por el Tratado de Lisboa. Hasta ahora, era el Consejo Europeo -integrado por los jefes de Estado o de Gobierno de los países miembros- quien consensuaba un candidato y lo proponía al Parlamento. Las elecciones de este año adquieren, pues, una trascendencia mayor al ser casi unas presidenciales, muy del estilo de las generales en España. En explicar esto incidirán también las principales fuerzas en la campaña electoral.