Todos los partidos salvo el PP tienen ya elegido a su candidato europeo

"En el PP se busca candidato, se busca programa, se buscan ideas, pero no las encuentran". Con esta elocuente frase trató de rentabilizar hace unos días Elena Valenciano, cabeza de lista del PSOE para el 25 de mayo, el retraso de Mariano Rajoy en anunciar a su número uno para esos comicios. La dirigente socialista no tiene todavía un rival a quien lanzar directamente sus críticas y por ello emitió esa efectista frase, que parece no podrá repetir ya muchas más veces. El PP elegirá a su candidato probablemente el lunes, rellenando así el único hueco libre en los carteles electorales de las europeas.

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Los socialistas fueron los primeros en designar a la suya, hace ya un mes. La Ejecutiva del PSOE aprobó por unanimidad el nombramiento de la vicesecretaria general, que será ratificado en unos días por el Comité Federal. Dicho organismo deberá cerrar la composición de la lista, que será cremallera -alternando hombres y mujeres- y podría alojar a varios exministros de Zapatero. En su elaboración tendrá mucho que decir el PSOE andaluz, cuya líder, Susana Díaz, cada vez tiene más peso en el partido. Como segundo de a bordo irá Ramón Jáuregui o Juan Fernando López Aguilar, candidato en 2009, a los que podrían acompañar otros excompañeros de Consejo de Ministros como Trinidad Jiménez, Valeriano Gómez o José Blanco. Además, se incluirá a varios jóvenes del partido entre los primeros puestos –Javier López, representando al PSC, Sergio Gutiérrez o Juan Ramón Ferreira- y se tratará de contentar a todas las federaciones. Las encuestas dan a los socialistas unos 17-19 escaños –en 2009 obtuvieron 23- de los 54 que hay en liza y Ferraz confía en que una buena campaña de Valenciano –vicesecretaria del partido desde que Rubalcaba se hizo con las riendas, europarlamentaria de 1999 a 2007- les permita ganar las elecciones al PP, lo que venderían como el inicio de un nuevo ciclo.

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Las europeas son las únicas elecciones donde hay una sola circunscripción, hecho que beneficia a los partidos minoritarios de ámbito nacional. Si la participación es similar a la de hace cinco años, 250.000 votos serían suficientes para sacar un escaño. De esta manera, formaciones en auge como Izquierda Unida (IU) o Unión Progreso y Democracia (UPyD) esperan confirmar el buen resultado que las encuestas les pronostican. Los dos partidos repetirán candidato. Willy Meyer fue elegido recientemente cabeza de lista de la coalición–decisión que no gustó a Gaspar Llamazares, que podría presentarse por su cuenta con su corriente, Izquierda Abierta-, mientras que UPyD ratificó hace ya unas semanas al catedrático Francisco Sosa Wagner. Como número dos del partido de Rosa Díez irá Maite Pagazaurtundúa, hermana del socialista asesinado por ETA Joseba Pagazaurtundúa.

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También los nacionalistas catalanes, una vez descartada la posibilidad de concurrir en coalición, tienen ya su cartel electoral. El economista Ramon Tremosa representará a Convergència–dentro de la Coalición por Europa donde también se integrarán nacionalistas vascos y canarios-, mientras que ERC se decantó por el filósofo Josep María Terricabras. Partidos de nuevo cuño como Vox o Podemos están pendientes de ratificar por los órganos correspondientes a Alejo Vidal Quadras y Pablo Iglesias, respectivamente. El abogado Javier Nart, por su parte, liderará la candidatura de Ciudadanos. Por último, el periodista exdirector de Gara Josu Juaristi encabezará la lista de EH Bildu, en la que se integrarán Eusko Alakartasuna, Aralar y el BNG.

Todas las cartas boca arriba, pues, a la espera de que Rajoy desvele al fin su apuesta y arranque la precampaña de estos comicios que pueden marcar un punto de inflexión y un cambio de ciclo electoral o reflejar que la base electoral del PP es más fuerte de lo que reflejan las encuestas.