Salvo en el 11-M el voto oculto acaba en el Partido Popular

El Centro de Investigaciones Sociológicas diferencia en su encuesta trimestral entre la intención de voto y la estimación de voto. Los datos de la intención de voto responden a la respuesta impulsiva a la pregunta de ¿A qué partido votaría usted, si mañana se celebrasen las elecciones?. En el otro caso, los datos se obtienen de la 'cocina del CIS', analiza los datos de la intención de voto e incluye a todos aquellos encuestados que no han respondido o que no saben a quién votarán.

A partir de esto y tras analizar los resultados de las últimas elecciones podemos concluir que la mayoría del voto indeciso suele decantarse por el PP en las elecciones. A continuación analizamos los datos de las elecciones desde 1996 hasta las últimas que fueron en el año 2011.

En el CIS de enero de 1996 el PP era el partido con la mayor intención de voto con el 25,8% mientras que el PSOE se quedaba con el 24,2%. Si al dato del PP le sumamos el dato de esa encuesta del voto oculto el porcentaje se incrementa hasta el 41,3%, solo 2,71 puntos por encima del resultado real que fue del 38,79% de los votos. En esta encuesta la abstención era del 7,3%. En este CIS la estimación del voto para este partido era del 40,6%, lo que supone 14,8 puntos más que la intención de voto o lo que es lo mismo, casi la totalidad del voto oculto que en ese momento era del 15,7%.

Cuatro años después, en las elecciones del año 2000, el PP ganó con el 44,52% de los votos. En ese CIS el voto oculto era del 17,3% y pudo ser el que impulsó al PP ya que en la encuestas solo tenía un 30,6%. La diferencia entre la estimación y la intención de voto en este CIS en el partido popular era de 10,9%, un porcentaje algo inferior al dato de las personas indecisas que fue de 17,3%.

El CIS de las elecciones de 2004 fue el más alejado a la realidad por el 11-M. El atentado se produjo tan solo unos días antes de las elecciones y cambió el panorama electoral de arriba a abajo. En la encuesta se pronosticaba que el 24,3% de los encuestados no sabía a quién votar, un porcentaje que se repartió entre PP y PSOE. Ambos partidos tuvieron mejores resultados que en la encuesta, pero el PSOE ganó al PP, cuando el sondeo daba la victoria a los populares.

En 2008 el PSOE ganó las elecciones con el 43,86% de los votos, en ese CIS la abstención era del 17,3%. Los datos que ofrecía esta encuesta para el PP eran del 21,5%, pero al final consiguió llegar hasta el 39,93% de los votos. Los datos reales muestran que el Partido Popular incrementó su resultado en 18,43%, un dato algo superior al voto oculto (17,3).

En las últimas elecciones, fue el equipo de Mariano Rajoy el que se alzó con la victoria con el 44,63%de los votos. En estas elecciones la abstención fue del 15,4% un dato que le pudo ayudar a pasar del 30,5% que le daba la encuesta al dato que tuvo en la realidad. Este se acercaba mucho al de estimación de voto del CIS (46,6%).

El voto oculto es la clave para que un partido gane o pierda las elecciones. En enero de 2004 se registró el voto indeciso más alto de la historia del CIS, en ese momento alcanzó el 24,5%. Le sigue el dato de octubre de 2013 con un 21,5, el de enero de 2014 con un 21,1 y el de abril de 2009 con un 20,8. El dato que tenemos en la actualidad, el del último CIS (enero de 2015) es del 20,8%, el quinto más alto de la historia de esta encuesta. Quedan tres CIS para las próximas elecciones pero si se mantienen los datos de las últimas encuestas es posible que la casilla de 'no sabe a quién votar' no baje del 20%. Como ya ha dicho Pedro Arriola, asesor del PP, la clave está en movilizar a este electorado. De ahí saldrá el ganador de los comicios.