Mercedes Vinuesa, directora de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, comparecía en rueda de prensa para explicar cómo se he llevado a cabo la repatriación del sacerdote Miguel Pajares y las críticas sobre el estado del hospital Carlos III. Vinuesa ha explicado las 36 horas que han transcurrido desde que el Gobierno decidiera la repatriación del religioso desde Liberia.
Aquí es cuando ha aprovechado para sacar pecho. Vinuesa ha defendido la coordinación entre los diferentes ministerios (Defensa, Exteriores y Sanidad) y la Comunidad de Madrid. Ha asegurado que el avión medicalizado que ha viajado a Liberia y que ha traído de vuelta al sacerdote y a la monja estaba en inmejorables condiciones. Tanto es así, ha matizado, que hasta ha recibido las felicitaciones del gobierno liberiano, de la Organización Mundial de la Salud y de Atlanta, donde hay dos pacientes americanos infectados con el virus. También ha confirmado que Francia se ha interesado por el procedimiento llevado a cabo por el Gobierno español.
Algo que también ha ratificado la Comunidad de Madrid que ha defendido la elección del Carlos III y también ha asegurado que Sanidad le ha informado en todo momento. Además, preguntado por los periodistas por las críticas que está recibiendo el Gobierno de la región por las políticas de austeridad aplicadas en este centro hospitalario, Alemani indicó que "el Hospital no está desmantelado", y que lo único que se hizo es que pasara a depender del Hospital de La Paz. Así, el director general de Atención Primaria del Sermas desmintió que hayan existido problemas de comunicación y coordinación entre la administración central y autonómica, y añadió que "el Ministerio de Sanidad nos ha tenido informados en todo momento".La llegada se hizo tarde y mal
El sindicato CSIF ha criticado la forma en que el sacerdote Miguel Pajares, paciente contagiado por ébola, ha sido trasladado al Hospital Carlos III de Madrid, según declaró Manuel Torres, delegado sindical en el centro hospitalario.
Torres, uno de los doce miembros del personal médico que atenderá a Pajares durante su estancia en el hospital, señaló en declaraciones a la prensa, que los empleados desconocían que el destino del paciente iba a ser el Hospital Carlos III, por lo que hasta las 22.00 horas de anoche estuvieron ocupados con preparativos de última hora.
"La llegada del cura se ha hecho tarde y mal", destacó Torres, quien además comentó que a los familiares de los pacientes ingresados en el Hospital Carlos III no se les avisó de su traslado al Hospital de La Paz, salvo a aquellos que estaban presencialmente en el centro médico.
Torres afirmó que el paciente Miguel Pajares se mantiene estable, vigilado por un circuito de cámaras instalado en su habitación. A este respecto, indicó que el pronóstico de Pajares"es el que todos imaginan", dado que a día de hoy no existe cura para el ébola.
"Hoy no hay cura, mañana o pasado puede que sí. Por el momento aplicamos cuidados paliativos", concluyó el enfermero, quien recordó la existencia del suero con el que está tratando a dos pacientes en EEUU, aunque no confirmó que éste se vaya a utilizar con el sacerdote.El Carlos III, afectado por los recortes
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (Fasdp) mostró este jueves su sorpresa por el traslado de los dos ciudadanos españoles a un centro de referencia en enfermedades tropicales como el Hospital Carlos III de Madrid, "deteriorado por los recortes".
En ese sentido, denuncian en una nota que en un momento de "deterioro de la sanidad pública", auspiciado tanto por el Gobierno como por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, se haya actuado de una manera "desproporcionada, dejando todo un hospital para atender a dos personas".
Del mismo modo, llaman la atención sobre lo que a su juicio representa una "evidente discriminación e inequidad respecto de otras personas con ciudadanía española que precisan atención sanitaria fuera de nuestras fronteras".
Ante esta situación, reconocen que "debe garantizarse la atención sanitaria de calidad a toda la ciudadanía, sin discriminaciones y utilizando medios proporcionados a las necesidades de salud". Por ello, piden "la dimisión de quienes pretendieron cerrar este centro que hoy se demuestra imprescindible para responder a los retos sanitarios".IU pide la comparecencia de Mato
El portavoz de Izquierda Unida (IU) en la Comisión de Sanidad, Gaspar Llamazares, dijo este jueves que su formación ha pedido la comparecencia de la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, por la "clamorosa improvisación" y "precipitación" con la que el Gobierno de España ha gestionado la crisis del ébola.
En declaraciones a Servimedia, Llamazares señaló que Mato tendrá que ir a la Diputación Permanente en cuanto se convoque y dijo que, si mañana la Organización Mundial de la Salud (OMS) decreta la situación de emergencia internacional por la epidemia del ébola, la ministra debería comparecer inmediatamente para ofrecer "información que tranquilice a los ciudadanos".
"Ha habido una clamorosa improvisación en esta materia", sostuvo Llamazares, para quien el Gobierno se ha "precipitado" con la repatriación del español con ébola, Miguel Pajares, puesto que "la iniciativa ha sido escasamente argumentada".
"Esperamos un poco de seriedad" de la ministra de Sanidad, manifestó Llamazares, para quien Mato debería despejar las dudas que se han generado como consecuencia de una información que "hasta ahora ha creado incertidumbre". Por tanto, solicitó que desde el Ministerio de Sanidad se lance un mensaje tranquilizador a los profesionales del sector.
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