Schutz será relevado como embajador de Israel tras tres años en el cargo

Madrid.- El embajador de Israel en España, Raphael Schutz, que lleva más de tres años al frente de la misión diplomática en Madrid, será relevado próximamente de su cargo, que a partir de ahora asumirá el también diplomático Alón Bar.

Schutz, que fue nombrado embajador de Israel en julio de 2007, protagonizó recientemente una polémica por unas declaraciones en las que comparaba a los muertos del ataque a la flotilla humanitaria que se dirigía a Gaza con los accidentes de tráfico.

Unas afirmaciones que recogieron todos los medios de comunicación españoles y por las que más tarde se vio obligado a pedir disculpas públicas ante lo que consideró un "error humano desafortunado", en una multitudinaria rueda de prensa.

En ella, el diplomático se esforzó por defender la legalidad de aquella acción, que se saldó con nueve muertos, a la vez que se quejaba de que se había impuesto un pensamiento único y propagandístico de corte antisemita en la mayoría de medios de comunicación.

Ahora tras poco más de tres años como embajador de Israel en España será relevado por Alón Bar, hasta ahora director general adjunto de Relaciones Culturales, una vez se completen los trámites habituales en estos casos.

La Comisión del Servicio Exterior aprobó ayer su nombramiento tras recibir numerosos testimonios favorables por parte de altos mandos del Ejército, el Mosad (los servicios de inteligencia en el exterior), la Agencia Israelí de Energía Atómica y la ex ministra Livni.

El nuevo embajador, que ya estuvo destinado en Madrid en la década de los noventa como número dos de la legación israelí, es uno de los mayores expertos en asuntos estratégicos dentro del Ministerio de Exteriores y asesor para asuntos políticos y diplomáticos de la ex ministra Tzipi Livni.

Fue asesor de Livni cuando ésta ocupó la cartera de Exteriores entre 2006 y 2009 y director general adjunto del Departamento de Asuntos Estratégicos, uno de los cargos más sensibles del Ministerio.

El año pasado fue cesado de este último puesto por el actual jefe de la diplomacia israelí, Avigdor Lieberman, tras acusarle en declaraciones al diario israelí en ruso "Vesti" de haber filtrado a otro rotativo, "Haaretz", información confidencial que podría haber causado gran daño a la seguridad nacional.

El servicio secreto y la Administración Pública investigaron los hechos y, rápidamente, concluyeron que Bar no había participado en la filtración, aunque no se le restituyó en el cargo.

Desde entonces Bar ha sido director general adjunto de Relaciones Culturales, y hace unos meses presentó su candidatura, en un concurso interno, para encabezar la embajada israelí en Madrid, que dirigirá próximamente.