Toma posesión el presidente regional andaluz y promete defender lo público

Sevilla (España), 5 may.- El socialista José Antonio Griñán tomó hoy posesión como cuarto presidente electo del Gobierno regional de Andalucía (sur), ofreció al Gobierno central lealtad institucional y diálogo leal con la oposición en esta autonomía, y reafirmó su compromiso con la defensa de las políticas públicas.

El acto se desarrolló en el Parlamento andaluz con la asistencia de numerosas autoridades civiles, religiosas y políticas, entre ellas el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro; la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo; y el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba.

En su intervención, Griñán se presentó como el primero de los servidores públicos y afirmó que, ante la actual crisis económica que sufre España, "no es tiempo de pasos atrás, sino de políticos y política valiente, con los pies en la tierra y que sean capaces de mirar hacia adelante sin intereses partidistas o personales".

Al acto también asistió el coordinador regional de Izquierda Unida (IU), Diego Valderas, que ocupará la Vicepresidencia de la Junta (Gobierno regional) en virtud del Ejecutivo de coalición formado con el PSOE tras las elecciones regionales celebradas el pasado 25 de marzo, que no dieron la mayoría absoluta a ninguna formación política.

Tras prometer su cargo, el reelegido presidente de la Junta de Andalucía reafirmó su defensa de lo público.

"Una sociedad desregulada o que privatiza servicios públicos esenciales termina siendo una sociedad inestable y desigualitaria", incidió Griñán.

Al igual que hizo en su discurso de investidura en el Parlamento regional el pasado jueves, Griñán insistió en que será un "Gobierno de coalición con todos los andaluces, fuerte en el diálogo y leal con la oposición", a la que pidió lo mismo.

Tras reafirmar sus ideas socialistas y valorar el legado de los expresidentes de la Junta, algunos de los cuales como Manuel Chaves asistieron al acto, agradeció al líder de los socialistas españoles, Alfredo Rubalcaba, su presencia en la toma de posesión.

En representación del Gobierno español intervino el ministro Montoro, quien ofreció al Ejecutivo andaluz una "leal colaboración institucional" para desarrollar el proyecto político de lucha contra la crisis y el desempleo, y confió en que puedan encontrar el "camino común" en aras al interés general de todos los andaluces "a través del único camino que se llama Europa y el euro".

La unión de las fuerzas de izquierda permitió que Griñán repita al frente de esta región española pese a que el Partido Popular (PP, centroderecha) fuera la fuerza más votada en las elecciones regionales de marzo.

Por primera vez, el PP, encabezado por Javier Arenas, ganó los comicios, al obtener 50 diputados, con el 40,64 % de los votos, frente a los 47 del Partido Socialista.

Sin embargo, el apoyo de IU, que tiene 12 escaños, facilitó que los socialistas se mantengan en el poder en esta comunidad autónoma que gobiernan desde hace 30 años.

Andalucía, junto con el País Vasco, es el único gobierno regional que el PSOE conserva, ya que el PP liderado por el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, gobierna en la mayoría de las regiones autónomas.

Esta región de España de 8,4 millones de habitantes es la comunidad autónoma que registra el índice de desempleo más alto del país, un 33,17 % frente al 24,44 % de la media española, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa.