Un detenido en Girona colaboró con los etarras Martitegi y Goikoetxea

Madrid.- Uno de los dos presuntos etarras detenidos hoy por los Mossos d'Esquadra en Camprodon (Girona), Adur Aristegi Aragón, estaba "vinculado" con el ex "número uno" de la banda Jurdan Martitegi, arrestado en Francia el 19 de abril del año pasado, y con el ex jefe del "comando Vizcaya" Arkaitz Goikoetxea.

Así lo aseguraba el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón en el auto en el que el pasado 14 de enero acordó procesar a Aristegi por el delito de colaboración con el "comando Vizcaya" de ETA, por el que permanecía en libertad bajo fianza de 12.000 euros tras haber sido detenido en julio de 2008.

En la resolución, Garzón afirma que Aristegi "estaba vinculado con Jurdan Martitegi Lizaso y mantenía contacto a través de internet con el miembro 'legal' de ETA, Íñigo Gutiérrez", procesado junto al anterior por el juez Santiago Pedraz por el atentado con furgoneta-bomba en la casa cuartel de la Guardia Civil de Legutiano (Álava) que mató al agente Juan Manuel Piñuel el 14 de mayo de 2008.

El auto de Garzón añadía que Aristegi estuvo en contacto con Arkaitz Goikoetxea, con quien se entrevistó junto con Gutiérrez el fin de semana del 20 al 22 de junio de 2008 en Ezcaray (La Rioja).

Justo un mes después, el 22 de julio de 2008, Goikoetxea fue detenido en una operación de la Guardia Civil que permitió desarticular el "comando Vizcaya".

"De igual forma han quedado constatadas las vinculaciones de Adur Aristegi con Gaizka Jarreño y Libe Agirre Mazaga, en cuya vivienda podría haber estado oculto el liberado de ETA Jurdan Martitegi", decía Garzón.

En el mismo auto en el que cita a Aristegi, el magistrado procesó a los ex dirigentes de ETA Garikoitz Aspiazu, "Txeroki"; Jurdan Martitegi y Aitzol Iriondo -considerados los últimos "números uno" del "aparato militar" de la banda, ya detenidos- por ocho atentados cometidos por el "comando Vizcaya" en 2007 y 2008.

Garzón también acordó en esa resolución el procesamiento de Arkaitz Goikoetxea, detenido en julio de 2008 y considerado el responsable del comando, y a nueve presuntos miembros o colaboradores del mismo, a los que acusó, entre otros delitos, del intento de secuestro de un concejal del PSE-EE de Eibar (Guipúzcoa) a quien pretendían mantener sedado un par de días antes de matarlo.