Yuste llama a superar el “divorcio” entre las leyes y las consecuencias de su aplicación

El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, llamó hoy a superar el “divorcio” entre las “normas que aplaudimos y las consecuencias necesarias de su aplicación” para evitar los “juicios simplificadores”.
En el acto de entrega de medallas al mérito penitenciario, Yuste criticó que en muchas ocasiones al aplicar la ley se acusa a quienes lo hacen de “acomodar” la norma a su interés cuando sólo atienden a las “obligaciones que impone el Estado de Derecho”. Por eso, ante la reforma penal que se concreta en estos momentos, hizo un llamamiento para superar ese “divorcio”.
En este homenaje, que se celebra con motivo de la festividad de Nuestra Señora de La Merced, patrona de la Institución Penitenciaria, el secretario general quiso recordar la “aprotación generosa” que han realizado estos funcionarios en “puestos comprometidos y en momentos difíciles”.
Los funcionarios de prisiones han sido blanco prioritario de la banda terrorista ETA, pero cada vez que se reconoce su “sacrifico y sufrimiento” se recuerda a los terroristas que “no han conseguido su objetivo” porque “nosotros somos más y mejores”, en palabras de Yuste.
Hoy se buscaba premiar la labor de los más de 25.000 funcionarios de prisiones, así como de otras entidades y organizaciones, que colaboran en la reinserción de los reclusos, tal y como establece la Constitución, llegando así donde “la adminsitración no llega”. De este modo se evita, según Yuste, que alguien “reescriba la Historia con amnesia interesada”.
La reinserción es el fin último de la privación de libertad en España. Las penas no tienen un carácter meramente punitivo sino que buscan que los reos superen las circunsancias que les condujeron a delinquier porque, tal y como remarcó el secretario general, sólo meidante la reinserción España se reivindica como “sociedad civilizada”.
Al mismo acto acudió el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, quien destacó la labor “a cara descubierta” de estos funcionarios que en muchas ocasiones cumplen su deber frente al “verdugo” que les intentó matar, o que directamente acabó con la vida de un compañero o amigo.
Fernández Díaz quiso recordar el “valor añadido” de enfrentarse con la “ley como único instrumento” a la barbarie criminal. “A los terroristas se les derrota también a diario dentro de las prisones”, remarcó.
Las medallas al mérito penitenciario, máximo galardón por los servicios prestados a la administración, premian las tareas que ayudan a reconducir a los presos hacia la vida en comunidad. “Si no somos capaces de recuperar para la convivencia a estas personas, estamos cimentando el conflicto futuro en nuestras calles y alejando legítimas aspiraciones de mejora en nuestra seguridad colectiva”, aseguró el ministro.
Fernández Díaz se manifestó en la misma línea que Yuste al afirmar que “la fortalaleza de nuestra sociedad reside en el Estado de Derecho, firmeza que se demuestra cumpliendo siempre la ley, tanto cuando sus efectos nos satisfacen, como cuando sus consecuencias nos repuganan profundamente”, en clara alusión a la polémica desatada hace unas semanas por la excarcelación del preso de ETA Josu Uribetxeberria Bolinaga. Asunto que, por otra parte, abrió una brecha en el PP y cuya oposición estuvo abanderada por el eurodiputado Jaime Mayor Oreja y la expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre.
Además, el ‘caso Bolinaga’ desató las críticas al Gobierno de las asociaciones de víctimas del terrorismo, enfrentadas a la política antiterrorista del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, y más en sintonía con las propuestas de los conservadores, quienes durante las legislaturas de Zapatero llegaron a encabezar las manifestaciones de estos colectivos.