Romper el círculo de la pobreza infantil: así es como Sonia logró convertirse en educadora y pedagoga

El sueño de Sonia siempre fue ayudar a niños y jóvenes, por eso se formó como pedagoga y educadora. Sin embargo, su infancia no fue nada fácil y tuvo que romper con la desigualdad. Lo logró de la mano del programa CaixaProinfancia que, en su apuesta por impulsar la transformación y el progreso del ámbito social, le dio las herramientas necesarias para poder hacer su sueño realidad.

EN COLABORACIÓN CON FUNDACIÓN ”LA CAIXA”

Desde pequeña Sonia tenía claro que tenía un don para ayudar, cuidar y entender a la infancia. Pero las cosas no siempre son como nos gustaría, y Sonia tuvo que crecer demasiado pronto. Se volcó en sus estudios, pero lo hizo con excesivo ahínco y, al volver a casa, se veía sobrecargada con enormes responsabilidades.

“Si pudiera decirle algo a la Sonia niña sería que disfrute del proceso y que no se autoexija demasiado, que trabaje y se esfuerce, pero cuidándose”, reconoce la joven, que ahora tiene 24 años. Esa niña, a la que le pediría que “confiara en sí misma” y que “respirara cuando tenga miedo” porque “siempre saldrá la luz de su corazón para poder iluminar la salida”, es ahora graduada en Educación Infantil y Pedagogía.

La ayuda que necesitaba para poder cumplir su sueño vino de la mano del programa CaixaProinfancia en Ecca Social, quienes le acompañaron durante toda su etapa escolar y trabajaron con ella su autoestima para que pudiera terminar sus estudios.

“Me ayudó a encontrarme a mí misma, a potenciar mis cualidades, a sanar mis heridas emocionales para poder tener una fortaleza interna que me permitiera conseguir todos mis sueños”, explica Sonia, que también narra cómo, durante esa época, se desarrolló su interés por la educación y la psicología.

“Siempre soñé con poder aportar al mundo todo mi aprendizaje positivo, para poder contribuir a que muchos puedan descubrir sus potenciales, de igual modo que lo hice yo”- Sonia, participante del programa CaixaProinfancia

Reconoce que su vocación siempre ha sido ayudar y mejorar la vida de las personas. Con este propósito la pedagogía, además, le proporciona “una amplia red para poder trabajar con las personas en todas las etapas de su vida desde la niñez hasta a la adultez”. Actualmente se ha embarcado también en el mundo de la psicología “para poder completar las disciplinas que más me apasionan”.

Como educadora y pedagoga expone que el mayor reto al que se enfrentan es a la era digital. “Los más afectados son los/as niños/as y adolescentes del momento. Hay mucho trabajo que hacer con ellos/as para que su desarrollo integro no se vea dañado”, reflexiona Sonia, que agrega, “nos enfrentamos a una sociedad digital, donde el conocimiento fluye con naturalidad y ya no se puede distinguir entra realidad y ficción”.

De acuerdo con los valores de la Fundación ”la Caixa”, Sonia afirma: “Somos lo que somos gracias a la educación que recibimos desde que nacemos, en el hogar, en la escuela, en la calle, en cualquier contexto en el que nos encontremos”. Por ello, su mayor sueño es “ser un referente”: “Siempre soñé con poder aportar al mundo todo mi aprendizaje positivo, para poder contribuir a que muchos puedan descubrir sus potenciales, de igual modo que lo hice yo”.

El impulso de Ecca Social ayudó a Sonia a ser educadora y pedagoga.
El impulso de Ecca Social ayudó a Sonia a ser educadora y pedagoga.
FUNDACIÓN ”LA CAIXA”

¿Qué se puede hacer frente a la pobreza infantil?

En España, uno de cada tres menores está en riesgo de exclusión social. Además, el 29 % de los menores de 18 años se encuentran en situación de riesgo de pobreza, y el 28 % de los jóvenes está en situación de desempleo. Esta pobreza infantil no afecta solo a quienes la padecen, sino que también tiene un coste de, como mínimo, 63.079 millones de euros al año. La Fundación ”la Caixa”, una entidad en cuya esencia se encuentra el impulsar la transformación y el progreso del ámbito social, no ha querido quedarse al margen.

Utilizando metodologías propias e innovadoras, y de la mano de un millar de entidades e instituciones, ponen el foco en programas con un alto impacto transformador. Esta es la razón que les llevó, hace más de una década, a lanzar el programa CaixaProinfancia, un modelo de acción social integral que tiene como objetivo combatir la pobreza infantil.

Durante estos más de 10 años, este programa ha trabajado mano con mano con la Administración pública, centros educativos, centros de salud y más de 400 entidades sociales, como Ecca Social, para tratar de romper el círculo de la desigualdad y la pobreza.

Niños, como lo fue Sonia en su momento, pueden acceder a refuerzo educativo, atención psicoterapéutica personal y familiar, apoyo educativo familiar y actividades de ocio y tiempo libre dentro de un modelo de acción social integral.

CaixaProinfancia es un modelo de acción social integral que lleva más de una década combatiendo la pobreza infantil

Pero, además, el modelo integral del programa CaixaProinfancia incluye ayudas directas para alimentación e higiene infantil, gafas y audífonos y equipamiento escolar. Con todo ello, se busca aumentar la implicación de las familias en el ámbito escolar y mejorar el rendimiento académico de los niños, lo que contribuye a un descenso significativo de los casos de abandono escolar.

Hasta 2022 más de 62.005 niñas y niños habían sido atendidos por este programa, 62.005 historias como la de Sonia que, llena de ilusión, necesitó este impulso externo para poder romper con la pobreza y que, como ella explica le ayudó a “reconstruirme como persona, crecer y evolucionar”.

Ahora la joven mira al futuro con esperanza, pero no se le olvida mandar un mensaje alto y claro: “Tenemos que potenciar el talento de nuestras futuras generaciones para que el bienestar social y el desarrollo de la humanidad sigue evolucionando siempre positivamente. Nuestros niños/as serán los que dirijan nuestra sociedad en el futuro y tenemos que dotarlos de todas las herramientas posibles para que puedan progresar de forma positiva”.