El Brexit en 2020: el calendario para no perderte con las citas clave del 'divorcio'

El próximo 31 de enero, será el momento en el que la carrera del Brexit arranque como tal, el momento en el que Reino Unido dejará de pertenecer a la Unión Europea como Estado y en el que comenzará a desconectar los lazos que le unen con el bloque. Se abrirá a partir de entonces un periodo de transición que el primer ministro británico Boris Johnson pretende dure como máximo 11 meses, para lo que este mismo mes ha aprobado una nueva ley que ha puesto bastante nerviosos a los mercados puesto que elimina la posibilidad de cualquier prórroga adicional. A lo largo de ese paréntesis, Londres seguirá formando parte de las principales estructuras de la UE y estará obligada a cumplir todavía con algunas regulaciones.

La fecha del 1 de marzo va a dar lugar al inicio de un proceso de negociación como máximo de 11 meses que se prevé bastante difícil, puesto que servirá para determinar el tratado comercial que regirá la relación comercial entre ambas potencias. Johnson pretende alcanzar un 'Canadá +', es decir, un tratado similar al que la UE tiene con Canadá pero con ciertas mejoras. El problema está en que la UE y Ottawa tardaron siete años en ponerse de acuerdo sobre la relación por la que se regirían y, según los analistas, pretender lograrlo en once meses parece complicado.

Además, Johnson deberá hacerlo logrando satisfacer a una población que está muy dividida sobre cuál debe ser su relación con los Veintisiete y, sobre todo, plantando cara a los deseos independentistas de Escocia y quizá también de Gales e Irlanda del Norte, donde están creciendo los deseos de anexionarse con la República de Irlanda. El hombre que pelea por separarse de la UE deberá hacerlo también por mantener unido a si territorio. 

El objetivo de Bruselas puede ser llegar ya a la Cumbre del Brexit del mes de junio con un "acuerdo básico" que pueda ser ratificado por el Parlamento Europeo antes del mes de noviembre. Aunque su principal reto va a ser poder alcanzar un pacto de libre comercio que modifique lo menos posible el status actual sin ponérselo tan fácil a Londres que otros países se vean tentados a abandonar la Unión. Michel Barnier, el principal negociador de la UE para el Brexit, está preparando ya el terreno para que el Brexit sea lo menos traumático posible pese a lo ajustado de las fechas. 

Los líderes europeos quieren centrar por ello todos los esfuerzos en los  puntos básicos y dejar otros aspectos, como los servicios, para después de 2020. Bajo ese supuesto, Barnier ha planteado la posibilidad de preparar permisos temporales a Reino Unido en materia de transporte (carreteras, aeropuertos o puertos) para evitar caos en las fronteras. 

"La amenaza a la integridad del propio Reino Unido, y los esfuerzos realizados por Johnson para plantear un acuerdo que favoreciera una salida ordenada y un periodo de transición nos hacen conceder una probabilidad baja a la salida sin acuerdo de Reino Unido el próximo diciembre de 2020", apuntan desde la consultora de análisis de mercado MacroYield.

Apuntan, además, que las redes que se están colocando desde la UE para que el precipicio que pudiera producirse a finales de 2020 sea más suave. Esto y la necesidad de entenderse de ambas potencias hacen prever que el riesgo Brexit podría seguir moderándose a lo largo del año que viene pese a los razonables picos de incertidumbre. Desde la mayor gestora de renta fija del mundo, PIMCO, ven solo posibles dos opciones: “un acuerdo limitado de libre comercio, que incluya solo a las industrias más importantes” o una “extensión del periodo de transición”.