Repsol modera las caídas

El Ibex 35 pone en riesgo los 9.200 ante la presión en la Franja de Gaza y los bonos

La demanda de activos refugio vuelve a repuntar ante el temor a que el conflicto entre Israel y Hamás alcance una dimensión mayor, mientras las Bolsas apenas se resienten, con los inversores pendientes de los resultados. 

Ibex 35
El Ibex 35 pone en riesgo los 9.200 ante la presión en la Franja de Gaza y los bonos. 
EFE

La prudencia se impone en los mercados. La posibilidad real de que Irán entre en escena en el conflicto entre Hamás e Israel aboca a los inversores a la recogida de beneficios. Aunque la situación en Oriente Medio ha tenido un impacto moderado, por ahora, en las Bolsas del Viejo Continente, siendo en el mercado de materias primas donde más se refleja la tensión, los parqués no han evitado las caídas en los primeros coletazos de la temporada de resultados. 

El Ibex 35, la referencia bursátil española, se deja un 0,9%, retroceso que le lleva a poner en riesgo el nivel de los 9.200 puntos. Prácticamente todos los parqués del Viejo Continente se tiñen de rojo, siendo Londres (-1,1%) y Fráncfort (-1%) donde más se ha notado la caída. Les siguen París (-0,9%) y Milán (-0,8%). 

A nivel nacional, la mayor parte de los valores que integran la referencia bursátil española cotizan con pérdidas. En este sentido, las caídas vienen lideradas por ArcelorMittal (-3,9%), IAG (-3%), Cellnex (-2,7%), Grifols (-2,6%) y Fluidra (-2,5%). En la banda contraria, tan sólo se salvan Acciona Energía (+4%), Repsol (+1,2%), Acciona (+0,55), Bankinter (+0,36%) y Mapfre (+0,35%). 

En el caso de la energética liderada por Josu Jon Imaz toma impulso al calor del precio del crudo. Al cierre de los mercados europeos, el precio del barril de Brent, referencia para el Viejo Continente se coloca por encima de los 91 dólares, un 1,6% más tras desinflar la escalada con respecto a la media sesión, mientras que el Texas avanza un 1,7%, hasta los 88,1 dólares. 

Entre tanto, la presión también se traslada al mercado de deuda. El interés del bono español a diez años vuelve a situarse por encima del 4%, mientras el papel estaodunidense ya roza el 5%, muy cerca de máximos desde julio de 2007 y el 'bund' alemán se acerca a la barrera del 3%. En este contexto, el precio del oro se instala en los 1.950 euros la onza, mientras el euro se deprecia un 0,43% frente al dólar, hasta situarse en 1,0531 dólares por cada unidad de la divisa comunitaria.

En mitad de estas circunstancias se han conocido una batería de datos macroeconómicos como el PIB de China, que registra una expansión del 1,3% durante el tercer trimestre del año con respecto a los tres meses anteriores, cuando la expansión fue del 0,5%. El problema está en la comparativa interanual, ya que entre julio y septiembre la economía de China creció un 4,9% respecto del tercer trimestre de 2022, avance inferior al 6,3% del segundo trimestre. Dentro del Viejo Continente, destaca el dato de IPC en Reino Unido, que se atasca en el 6,7%, mientras en la eurozona da un respiro y se modera al 4,3% durante septiembre, su menor avance en casi dos años, mientras que en el conjunto de la Unión Europea la métrica se moderó al 4,9% desde el 5,9% de agosto. 

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