El Ibex 35 entra en una nueva etapa. Después de tocar máximos desde 2018 con el asalto a los 10.100 puntos, la referencia bursátil española se mantiene al alza y apunta a nuevos objetivos. Un buen tono que lleva al selectivo a liderar en el Viejo Continente con un avance del 0,37%, hasta cerrar la sesión en los 10.178 puntos, en contraste con la atonía de Fráncfort (+0,04%) y Milán (-0,05%), así como de Londres (-0,22%) y París (-0,18%).
"Salvo algún factor imprevisto que, por ello, sorprenda a los inversores, esperamos que los mercados de bonos y acciones mantengan hasta finales de año el buen tono reciente, y acaben el ejercicio incluso a niveles superiores a los actuales", precisan desde Link Securities, que no descartan una pequeña corrección ante el "elevado nivel de sobre compra que presentan los índices, los valores y los bonos". Los vientos de cola también han llegado al mercado de deuda, en el que el bono español a diez años se sitúa en el 3,3%, marcando mínimos de julio, de tal modo que la prima de riesgo oscila sobre los 100 puntos.
En una sesión de escasas referencias macroeconómicas a la espera de los PMI de servicios de la eurozona, que se publicarán mañana, destaca el dato del desempleo español, que baja en noviembre hasta mínimos de noviembre de 2007, al tiempo que la afiliación experimenta un descenso que lleva a perder 11.583 cotizantes en términos medios y deje un total de 20,8 millones de trabajadores inscritos al sistema. En el plano europeo, las exportaciones alemanas caen más de un 8% a nivel interanual desde octubre.
En este contexto, los inversores mantienen su apuesta de que la inflación seguirá a la baja y los bancos centrales darán por finalizado su programa de alzas de tipos. Factores que provocarán que los rendimientos de los bonos continúen descendiendo y, en unos pocos meses, tanto la Reserva Federal (Fed) como el Banco Central Europeo (BCE) comiencen a bajar sus tasas de interés oficiales.
Este optimismo choca con el repunte de la cotización del oro, que ha llegado a colocarse por encima de los 2.100 dólares la onza esta mañana, aunque finalmente ha desinflado su escalada, hasta los 2.044 dólares. En otros mercados, el petróleo se desmarca de esta remontada en plena resaca por la reunión de la OPEP+ y sucumbe a las caídas. Así, el crudo de calidad Brent, de referencia en el Viejo Continente, marca al cierre europeo un retroceso del 0,7%, hasta los 78,7 dólares, en línea con el West Texas, que cae más de un 1%, hasta los 73,8 dólares.
De vuelta a España, la mayor parte de los valores cotizan al alza con Acciona Energía (+2,1%) y su matriz, Acciona (+1,7%), a la cabeza de estos ascensos junto a Grifols (+1,9%). Le siguen BBVA (+1,2%), CaixaBank (+1,2%) y Meliá, que rebota un 1% tras anunciar varias aperturas de hoteles en Europa y América. Entre los pesos pesados, es relevante la subida de Iberdrola (+0,79%) e Inditex (+0,16%) en contraste con Repsol (-1,8%), que lidera las caídas, junto a Fluidra (-2,5%). De forma paralela, Telefónica salda la sesión con un alza del 0,2% después de plantear a los sindicatos más de 5.100 salidas con el nuevo ERE.
