Perspectivas

IG apuesta por los sectores bancario y energético ante la elevada inflación

La firma de inversión cree que el Ibex continuará en 2022 la tendencia bajista que lleva registrando desde 2017 pese a su exposición a la banca, para la que esperan buenos rendimientos.

Las bolsas han vivido un año récord en 2020 a la baja y al alza.
IG apuesta por los sectores bancario y energético ante la elevada inflación
Pexel / Pixabay

La firma de inversión IG prevé que el principal riesgo tanto para la economía como para los mercados este año será la presión inflacionista. Un contexto en el que los sectores 'estrella' serán los bancos, las empresas relacionadas con el petróleo y el gas o los recursos básicos. Así lo ha destacado el analista Sergio Ávila, en un encuentro con los  medios, donde también ha destacado los riesgos que amenazan a los mercados. 

El incremento continuado de los precios beneficia, en general, a los bancos, el petróleo y el gas, los recursos básicos, los industriales, las inmobiliarias y los valores cíclicos, en general. Además, Ávila ha destacado que, en concreto, en En Estados Unidos, destacan el petróleo y el gas, las entidades bancarias-mientras no se desencadene una guerra-, los valores de metales y mineras y el consumo defensivo.

La elevada inflación, en el caso de Europa, está motivada por la subida de los precios de la alimentación y de la energía, con el gas al alza, al igual que el petróleo, que según sus previsiones podría rebasar los 100 dólares el barril en el primer semestre del año. "La fortaleza del precio del petróleo y otras energías como el gas natural ha provocado un fuerte aumento de los precios tanto en Estados Unidos como en Europa y otras zonas geográficas, lo que pone bajo presión a los bancos centrales, que tienen que tomar medidas para controlar un aumento de los precios desbocado", ha destacado Ávila.

Ávila considera que los bancos centrales "van tarde" en las subidas de tipos y ha explicado que el mercado descuenta ya varias alzas del precio del dinero por parte de la Reserva Federal de EEUU (Fed) este año. En su opinión, subirán entre cuatro y siete veces en Estados Unidos hasta finales de año. En el caso de Europa, ha considerado que el Banco Central Europeo (BCE) también podría verse obligado a subir tipos más rápido de lo previsto, ya que en un contexto de mejora económica, de subida de salarios y de los precios de la energía, ve difícil que se cumpla el objetivo de inflación.

No obstante, también avisa que la subida de tipos de interés por parte de los bancos centrales para controlar la inflación podría ser un "freno relevante" en el crecimiento económico y en los resultados empresariales de cara a futuro. Además, el incremento de los tipos de interés producirá un "shock de subidas de precios" y un endurecimiento de las condiciones financieras que presionará tanto al mercado de acciones como el de bonos, que ya lleva un tiempo presionado. 

La firma calcula que hay un 66% de probabilidad de que se registren alzas en los mercados, aunque Ávila ha añadido que las subidas de tipos de interés siempre han llevado a caídas en el corto plazo en los mercados de renta variable y en las rentabilidades de los bonos. En esta ocasión, las subidas se darán de una forma muy rápida, lo que puede provocar volatilidad, ya que el mercado no tendrá tiempo de estabilizarse entre una y otra. La banca, por su parte, será uno de los sectores que más se beneficiaría de esa subida.

Más 'cisnes negros' en 2022

Ávila ha señalado que para este año no es "tan optimista" ante los acontecimientos que pueden salpicar a la economía y los mercados. Aunque reconoce que "todavía se puede estar en renta variable, hay que ser selectivo". Entre los riesgos actuales destaca la posible guerra en Ucrania si Rusia invade finalmente Ucrania, lo que tendría un efecto directo en las materias primas y en la inflación. Las relaciones geopolíticas son un factor clave y el aumento de las tensiones en Oriente Medio es otro de los 'cines negros' a vigilar. Otra amenaza sería un crecimiento menor de lo esperado por nuevas variantes de la Covid que podría afectar a los resultados empresariales. 

Por otra parte, hay que prestar atención a los planes fiscales del Gobierno estadounidense en relación a los impuestos corporativos, sobre todo al sector tecnológico. Además, la deuda de las compañías es relevante ante el aumento de tipos de interés previsto y supone un riesgo que alguna compañía de gran tamaño acabe en quiebra. Por último, desde IG señalan que hay riesgo de que el aumento de las rentabilidades de los bonos -que funcionan de manera opuesta a su precio- haga más elevada la renta fija, "en detrimento de la renta variable". 

Asimismo, la economía global comenzará a desacelerarse en 2022, según las previsiones de la firma, en tanto que los inversores deberán de estar pendientes también de la sobrevaloración del mercado de cara a los próximos meses. "Es cierto que lleva estando sobrevalorado desde hace mucho tiempo, pero ahora que se van a subir los tipos lo normal es que el mercado recalcule las valoraciones empresariales ajustando las cotizaciones", ha señalado Ávila.

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