Las FARC, dispuestas a 'rectificar' el acuerdo de paz tras el 'No' de Colombia

Las FARC están dispuestas ahora a 'rectificar' el acuerdo de paz tras el rechazo de los colombianos en el plebiscito celebrado este fin de semana.

El jefe máximo de la guerrilla de las FARC, Timoleón Jiménez, abrió este lunes la posibilidad de "rectificar" el acuerdo de paz que fue rechazado, por mínimo margen, en el plebiscito del domingo en Colombia.

"Estamos analizando con calma los resultados para continuar, porque esto no significa que se ha perdido la batalla por la paz", ha afirmado el hombre conocido como 'Timochenko' a W Radio desde La Habana.

Según el líder guerrillero, las FARC "proyectarán iniciativas desde este momento para sacar adelante este proceso". Jiménez ha asegurado que el resultado del plebiscito "nos llena de más entusiasmo, nos compromete mucho más, porque de todas formas hay diversas lecturas y hay que analizarlas para ver en qué hay que rectificar".

En un comunicado, las FARC han anunciado "ante Colombia y el mundo, que sus frentes guerrilleros en todo el país permanecerán en Cese al Fuego Bilateral y Definitivo, como una necesaria medida de alivio a las víctimas del conflicto, y en respeto a lo acordado con el Gobierno Nacional".La encuestas han vuelto a fallar

Las encuestas han vuelto a fallar, como queda evidenciado tras el resultado del plebiscito celebrado este domingo. Igual que pasó con el Brexit en Reino o el no sorpasso de Podemos al PSOE en las elecciones generales de junio en España, nadie barajaba que no ganase la opción que señalaban todos los sondeos en el referéndum sobre el acuerdo entre la guerrilla de las FARC y el Gobierno de Juan Manuel Santos. Los colombianos que votaron, un porcentaje menor al 40 por ciento de la población, ha rechazado el referéndum y como ocurriera en Reino Unido, Colombia no tiene un plan B ya que se esperaba un victoria, aunque justa, del SI.

El presidente Santos ha aceptado la derrota del sí en el plebiscito por la paz. Rodeado de su equipo negociador, reconoció el triunfo del no y en sus primeras palabras aseguró que velará para que el orden público se mantenga y que el cese al fuego y las hostilidades se mantendrá vigente.

"Tanto el gobierno como las FARC estaban completamente seguros de que tenían el sí asegurado, inclusive la gente del no pensaba que iban a perder y que lo importante era perder con una votación digna. Nadie pensaba que no fuera a ganar", asegura el politólogo Germán Sahid, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad del Rosario de Bogotá a la cadena de televisión Univisión.

Todo estaba listo para empezar a escribir un nuevo capítulo de la historia colombiana, o al menos eso soñaban los que apostaban por el sí, que no pudieron evitar sentir una gran tristeza que les deja, de momento, sin una alternativa. "Es un panorama crítico para Colombia, donde lo que está a la vuelta de la esquina no es un acuerdo de paz para una apertura democrática. Tendremos que ver si el país reendereza el camino, pero por lo pronto es la crisis", considera el analista Camilo González Posso, presidente de Indepaz (Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz).

Por su parte, el analista político Fernando Giraldo, profesor de la Universidad Javeriana de Bogotá, dijo a Efe que se entra en una etapa “como de una caja negra” porque realmente no se sabe qué va a pasar. Para Giraldo, con el resultado del plebiscito “se debilitó toda la institucionalidad, se debilitó el Gobierno y el país quedó fracturado”.

El pacto firmado en un acto solemne ante la comunidad internacional, que contó con la presencia del ministro en funciones, José Manuel García Margallo y el rey emérito, Juan Carlos, es ya papel mojado. Pese al sufrimiento de cinco décadas, el proceso ha generado una cierta desidia en la sociedad que se ha mostrado en el plebiscito, donde apenas el 37,43 por ciento de los ciudadanos votó pese a que lo que estaba en juego era nada menos que la paz.

En un primer momento no se contemplaba una renegociación de los acuerdos, tal y como se recoge la página gubernamental del acuerdo. Sin embargo, a tenor de los expuesto anoche por los protagonistas podrían incluirse nuevas negociaciones relacionadas con las víctimas, la participación política o la justicia.. La tesis más repetida en las horas posteriores al referéndum es que Colombia ha votado no a este acuerdo pero quiere la paz.

En su intervención tras conocerse los resultados, el presidente Santos anunció que se reuniría este lunes con todas las fuerzas políticas del país "en particular con las que se manifestaron por el 'no' para buscar espacios de diálogo y determinar el camino a seguir". Además, Santos convocó una reunión en La Habana para que los equipos negociadores permanezcan en diálogo.

Por su parte, el líder de las FARC, Timochenko, reiteró su voluntad de paz. "Vamos a decidir entre todos cuál es el camino que debemos tomar para que la paz, esa que todos queremos sea posible y salga todavía más fortalecida de esta situación."

Por el momento, ambas partes mantienen su voluntad de mantener el alto el fuego. Pero aún quedan muchos escollos por resolver tras esta inesperada decisión. Uno de ellos la credibilidad del gobierno que dejará de ser el único interlocutor y otro de ellos es el papel del expresidente de Álvaro Uribe, uno de los rostro de la campaña del NO.