
Nueva York se prepara para recuperar la normalidad. La ciudad más azotada por el coronavirus, con más de 20.000 muertes, está implicada en mantener la distancia de seguridad y evitar las aglomeraciones. Prueba de ello es la última iniciativa uno de los parques de la ciudad, concretamente en Brooklyn.
Esta semana el Domino Park ha aparecido con círculos blancos en el césped artificial para delimitar los espacios con el fin de mantener la distancia social recomendada. La iniciativa ha llamado la atención de los ciudadanos y, a simple vista, pareció ser efectiva, ya que los habitantes se se repartieron y respetaron el dibujo del césped. ¿Se implantará esta medida en España?
They’ve made little round human parking spots in Domino Park in Brooklyn! (This park is often the poster child for social distancing fácil). pic.twitter.com/VJzZ0WAdeT
— Jennifer 8. Lee (@jenny8lee) May 15, 2020
Por lo pronto, en nuestro país con el avance en el plan de desescalada las playas y los parques ya están abiertos. Así, la iniciativa podría aplicarse en cualquiera de estos dos escenarios. En este momento, las diferentes comunidades autónomas y ayuntamientos estudian propuestas para mantener la seguridad recomendada. Además del uso de la tecnología mediante aplicaciones móviles, el control del aforo o parcelar el arenal son otras de ideas contempladas.
Medidas que se conocen hasta el momento
Aforo limitado con carriles de entrada y salida, distancias entre grupos de bañistas de dos metros, delimitación de filas a partir de la orilla y separación de zonas entre hamacas y toallas, son algunas de las medidas que se prevén. A ello se le suma las indicaciones que puedan aportar cada municipio. La delimitación de la arena en zonas y filas se impondría con el mismo fin que en el parque de Nueva York: garantizar la distancia de seguridad.
Hasta el momento, conocemos algunas de las iniciativas que llevarán a cabo los distintos territorios. Andalucía creará una aplicación gratuita que dará información en tiempo real sobre la afluencia de personas a la playa. Por su parte, en Balares algunos ayuntamientos valoran limitar el número de sombrillas de alquiler. En el municipio catalán de Lloret de Mar, el ayuntamiento plantea la división de sus dos playas principales en tres franjas:grupos de ancianos, familias y adultos sin niños, todos ellos con limitación de aforo.
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